Denunciado el Ayuntamiento de Boquiñeni por organizar una discomóvil el pasado 22 de mayo, durante el estado de alarma

Se enfrenta a una sanción penada con entre 3.001 y 60.000 euros, tal y como establece la Ley de Salud Pública.

Calle de Boquiñeni.'
Calle de Boquiñeni.'
Laura Uranga

El Servicio Provincial de Sanidad en Zaragoza ha iniciado un expediente sancionador contra el Ayuntamiento de Boquiñeni como presunto responsable de una infracción administrativa grave por la celebración de una discomóvil el pasado 22 de mayo.

Esta infracción está penada con una sanción de entre 3.001 y 60.000 euros, tal y como establece la Ley de Salud Pública de Aragón, por infringir las medidas que establece el estado de alarma decretado a causa de la pandemia de coronavirus, recuerdan fuentes del Gobierno de Aragón.

Este evento se programó en el marco de las fiestas en honor al Santo Cristo de Capilla, San Gregorio y San Miguel y fue denunciado por la Guardia Civil, han informado fuentes del Gobierno de Aragón.

El consistorio tiene ahora quince días para presentar alegaciones, tras lo cual se continuará la tramitación de expediente y se determinará, si procede, la sanción a aplicar.

Fiesta de 120 personas

Por otra parte, la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, ha respondido a preguntas de los medios de comunicación sobre una posible multa de más de 3.000 euros a un bar restaurante de Zaragoza por haber organizado el sábado pasado una fiesta privada con más de 120 participantes.

En declaraciones a los medios de comunicación, con motivo de su visita al escáner donado por la Fundación Endesa al Hospital Infantil de Zaragoza, la consejera ha subrayado que la "inmensa mayoría" de los aragoneses ha tenido un comportamiento "muy responsable" durante el confinamiento y en fases posteriores en relación con las medidas de aislamiento y protección para evitar la propagación de la pandemia.

No obstante, "no podemos evitar que se produzcan esta serie de circunstancias" de "grave irresponsabilidad", como la fiesta a la que acudieron 120 personas, que tuvo lugar cuando Aragón aún se encontraba en la fase 2 de desescalada del confinamiento, ha apuntado Repollés, para añadir que ahora lo importante es que se "tomen medidas" ante el incumplimiento de las normas.

Ha precisado que el Ministerio del Interior "ha tomado cartas en el asunto y estamos pendientes de ver cómo se arbitran las sanciones a todos los asistentes a esa fiesta". 

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