sucesos

El conductor del Porsche ensartado contra un guardarraíl huyó porque no tenía carné

La Guardia Civil ha logrado resolver el misterioso accidente ocurrido hace casi seis meses en Pinseque y por el que se investiga ahora a tres personas: la que iba al volante y sus presuntos encubridores.

El guardarraíl entró por el parabrisas del Porsche, atravesó el asiento del copiloto y salió por el maletero.
El guardarraíl entró por el parabrisas del Porsche, atravesó el asiento del copiloto y salió por el maletero.
Bomberos de Zaragoza

La Guardia Civil ha conseguido resolver el misterio del Porsche Macan que el pasado 26 de noviembre fue abandonado en Pinseque tras sufrir una violenta colisión contra el guardarraíl de la carretera de Logroño (A-68). Han pasado ya casi seis meses desde el accidente, pero todavía resulta difícil entender cómo la valla metálica atravesó por completo el vehículo, desde el parabrisas al maletero. Cuando llegaron las patrullas de Tráfico, el conductor se había dado a la fuga, lo que impidió dar respuesta a muchos interrogantes. Por ejemplo, si el coche circulaba hacia delante o marcha atrás. Lo único evidente desde el principio fue que nadie ocupaba el asiento del copiloto, que quedó literalmente ensartado por la pieza de hierro.

Pero los investigadores tiraron del hilo y han logrado resolver un extraño suceso por el que han acabado encausadas tres personas: el hombre que iba al volante y sus dos presuntos encubridores. Como informó entonces HERALDO, el deportivo no estaba a nombre de un particular, sino de una sociedad mercantil, lo que obligó al Grupo de Investigación de Accidente de Tráfico (GIAT) de la Benemérita a contactar con sus responsables para intentar identificar a la persona que lo conducía cuando se produjo el siniestro. Parecía algo sencillo, pero no lo fue, ya que el primer nombre que obtuvieron no se correspondía con el del verdadero conductor. De ahí que al final se abrieran diligencias contra tres personas.

Estado en el que quedó el vehículo tras chocar contra la bionda.
Estado en el que quedó el vehículo tras chocar contra la bionda.
Bomberos de Zaragoza

Y ¿por qué no se creyeron los agentes la información que les facilitaron inicialmente? Porque sospechaban de un vecino de Pinseque sobre el que pesaban varias denuncias anteriores por conducir sin carné. De hecho, este hombre había protagonizado un accidente muy parecido en 2007, cuando abandonó un Mercedes en pleno casco urbano de la localidad tras sufrir otro siniestro.

Le prestaron las llaves

Tras tomar declaración a los tres presuntos implicados en los hechos varias veces, la Guardia Civil llegó a la conclusión de que en la madrugada en que ocurrieron los hechos L. B. C., de 44 años, estuvo tomando copas con el encargado de la empresa propietaria del Porsche, J.A. D., de 51 años. Al parecer, quien estaba a cargo del vehículo era este último, pero pudo prestarle las llaves al otro, que tenía retirado el carné de conducir. L. B. C. reside en Pinseque, por lo que todo apunta que se dirigía a su domicilio cuando se salió de la calzada y chocó contra la bionda de la A-68.

El conductor debió pensar que si pedía auxilio al 112 llegaría la Guardia Civil y descubriría que tenía retirada la licencia. Además, parece que había estado bebiendo y podría dar positivo en la prueba de alcoholemia, por lo que descartó esta posibilidad y avisó al hombre que le había prestado las llaves del Porsche. Según los investigadores, ambos decidieron abandonar el vehículo siniestrado y preparar una coartada para encubrir a L. B. C., lo que les habría llevado a pedir la colaboración de una tercera persona.

Los dos hombres sabían que la matrícula conduciría enseguida a la Guardia Civil a la empresa propietaria del Porsche –o arrendataria, no ha podido confirmarse si el coche era de ‘leasing’–, por lo que presuntamente convencieron a A. G. N., de 59 años y vecino de Zaragoza, para que dijera que era él quien iba al volante.

Cuando los investigadores terminaron de encajar las piezas del puzle, abrieron diligencias contra los tres. Al conductor le atribuyen un delito de falsedad documental y dos contra la seguridad vial: uno por abandonar el coche de la calzada poniendo en peligro al resto de usuarios y otro por circular sin licencia. A J. A. D. lo consideran autor de la falsedad documental y cooperador necesario para el delito contra la seguridad vial. En cuanto a A.G .N., le imputan tan solo la falsedad. Ninguno de los tres ingresó en prisión por lo sucedido.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión