Una empresa de Zaragoza endulza la luna de miel a una pareja que se casó en el balcón el día que se declaró el estado de alarma

El portal de decoración Mil y Una Casa regaló varios muebles para su nueva casa a Alba y Dani, que admiten que "nunca habían pasado casi 1.400 horas juntos en un mismo espacio".

El 14 de marzo de 2020, el día en que se inició el estado de alarma por la crisis de coronavirus en toda España, Alba y Dani celebraron la boda más atípica que nunca habrían imaginado. Sustituyeron la atenta mirada de 190 invitados por la de 10 vecinos espontáneos, el vestido de novia por una bata de estar por casa, el banquete nupcial por un plato de espaguetis carbonara y la barra libre por todo lo que encontraron por el mueble bar.

Después de una boda inaudita, celebrada en el balcón de su casa, la luna de miel no podía ser menos. Estos jóvenes gallegos siempre soñaron con una luna de miel duradera y parece ser que el mundo se paró para que sus deseos fuesen órdenes. Eso sí, con menos dosis de vitamina D, menos paisajes y gentes que recordar al día siguiente, menos resacas y atracones de cocina portuguesa, pero con más creatividad, con muchas horas de pintura y manualidades, con buenas pelis, con lecturas pendientes y con muchas risas y conversaciones entre vinilos de David Bowie y Otis Redding.

Pero lo mejor de esta luna de miel aún estaba por llegar. Según Alba Díaz, la novia en cuestión, “a los pocos días de nuestra particular boda unos chicos majísimos de Mil y Una Casa (un portal de decoración y equipamiento de hogar fundada en Zaragoza) nos llamaron para felicitarnos, para inyectarnos mucha alegría y hacernos el mejor regalo de boda que podíamos tener en estos momentos, enviándonos un mogollón de muebles para poder decorar nuestra particular suite nupcial y otras dependencias de nuestra casa”.

Solidaridad y empatía ciudadana en tiempos de pandemia para premiar actitudes e ideas con chispa que levantan el animo de una población confinada. José María Baos, CEO de Mil y Una Casa, explica que en cuanto vieron la noticia de “la boda en el balcón” en los informativos, pensaron: “Esta pareja merece un premio” .

Daniel Camino (el novio) comenta entre risas: “Podemos denominarla como la luna de miel del aprendizaje, nos estamos conociendo más si cabe porque nunca habíamos pasado 1392 horas en el mismo espacio. Estamos aprendiendo a coser y bordar, a valorar el placer de cocinar diariamente, de despedirnos con un beso en mitad del pasillo para empezar nuestra jornada laboral y, sobre todo, estamos aprendiendo a valorar la labor de todos esos héroes sin capa que cada día con su trabajo, profesionalidad, amabilidad y sacrificio nos harán superar todo lo que quede por venir”.

Regístrate en la newsletter de HERALDO y tendrás cada día toda la información sobre el coronavirus.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión