Un improvisado equipo de 'rescatadores' entre la nieve en Paniza
Varios conductores se vieron atrapados por el temporal en la N-330. Vecinos de la localidad les ayudaron a desatascar sus coches de la nieve.
Armados con varias palas de mano y con la ayuda de un tractor. Así ayudó un grupo de vecinos de Paniza a varios conductores que se vieron bloqueados por la nieve este martes a mediodía, cuando la borrasca Gloria descargaba con más fuerza sobre esta localidad, a apenas 50 kilómetros de Zaragoza. Nadie en el pueblo recordaba una nevada semejante en las últimas décadas. Se llegaron a acumular hasta 40 centímetros en las calles, según las mediciones de los vecinos. Y Luis, Paco, Antonio o Miguel, entre otros jóvenes del municipio, no se lo pensaron dos veces y acudieron a ayudar a quienes los necesitaban.
Todos los conductores afectados seguían la misma ruta, venían desde el País Vasco con destino al Levante enlazando la AP-68 con la A-23. "Era el camino más corto que nos marcaba el GPS", aseguraba tiritando David, un joven de Murcia que regresaba de Bilbao con un amigo con el que viajó para ver el partido entre el Eibar y el Atlético de Madrid del pasado sábado. "No somos de ninguno de los dos equipos, pero somos muy futboleros", explicaba. "Nos hemos visto obligados a salir de la autovía a mediodía y nos hemos quedado aquí tirados hasta que un vecino ha venido a ayudarnos". Con la ayuda de palas retiraron la nieve de las ruedas, con un tractor marcaron el camino para volver a salir a la carretera y tras un empujón colectivo, los jóvenes murcianos pudieron continuar su marcha.
Tras ellos esperaba su turno una joven pareja de Gales. A sus 26 años, Claire viajaba desde Reino Unido con su novio, Emlyn, cuando se vieron bloqueados en Paniza. Aficionados a la escalada, se dirigían a Calpe para disfrutar de este deporte. "Hace una semana estábamos en Escocia y nos esperábamos mal tiempo, pero no aquí en España, donde se supone que hace sol", decía Claire, resignada pero sin perder la sonrisa. A pesar de llevar una furgoneta equipada con una cocina en su interior, la joven galesa esperaba en casa de unos vecinos a que su novio pudiera dar la vuelta al vehículo. "Llevamos horas bloqueados y no sé dónde vamos a dormir pero tenemos ganas de continuar", reconocía antes de despedirse agradecida a sus rescatadores.
Parecida suerte corrían Daniel y su pareja, que tras abandonar Bilbao a primera hora pensando en llegar a Benidorm diez horas después, seguían en Paniza a media tarde. "Una vecina nos ha ofrecido un café", decía. "Ahora nos tocará buscar un hotel. Nos han dicho que hay algunos aquí cerca, aunque puede que ya estén llenos con tanta gente afectada por el temporal", se lamentaba.
Desde su puerta, Laura Gaudioso, una vecina del pueblo, admitía que aunque no tenía camas para ofrecer, su casa estaba abierta para cenar o entrar en calor a quien lo necesitara.
Afortunadamente, una máquina quitanieves, que también se había quedado atascada en el puerto de Paniza, pudo continuar con su trabajo antes de que se pusiera el sol y todos los conductores atrapados en este punto de la N-330 pudieron continuar circulando hasta Cariñena.
También un vehículo de los Bomberos de la Diputación de Zaragoza tuvo que ser remolcado por un vecino con una retroexcavadora al quedarse atascado en la carretera que une Paniza con Aladrén.
