sucesos en zaragoza
Condenan a prisión al conductor ebrio y sin carné que cayó al canal tras chocar con 8 coches
Logró librarse tres veces de la cárcel por hechos similares, pero ahora tendrá que pasar cerca de 3 años en Zuera. Pese a no haber pagado el recibo del seguro, su compañía ha sido también condenada y deberá hacerse cargo de los cuantiosos daños.
El conductor ebrio y sin carné que el pasado 1 de diciembre cayó con su Mercedes al Canal Imperial tras protagonizar una temeraria fuga en la que chocó contra ocho vehículos irá finalmente a prisión. Ni una, ni dos ni tres. Cuatro veces ha tenido que ser juzgado y condenado Petre Pirjolea por delitos contra la seguridad vial para que al final acabe en Zuera. Eso sí, las dos últimas penas le fueron suspendidas con la condición de que no volviera a delinquir. Y como lo ha hecho, ahora no solo tendrá que cumplir los 15 meses de cárcel que le han impuesto por su última correría, sino que a estos habrá que añadir los otros 17 que le fueron perdonados por los delitos anteriores.
A través de su sentencia, la titular del Juzgado de lo Penal número 6 de Zaragoza, María José Alegre, recuerda que eran sobre las 6.00 del citado domingo 1 de diciembre cuando un taxista llamó a la central del 092 para alertar de la presencia de un Mercedes de color gris que circulaba de forma zigzagueante por la calle de Corona de Aragón. Una patrulla le salió al paso en San Juan de la Cruz e hizo indicaciones al conductor para que se detuviera, pero este pisó el acelerador y se dio a la fuga. Tras una larga persecución, al llegar al paseo de Colón el ahora condenado perdió el control en una curva, se llevó por delante una valla protectora y acabó en el Canal Imperial.
El conductor quedó atrapado en el interior del habitáculo, pero los Bomberos lograron rescatarlo poco después del agua. Antes de ser trasladado a urgencias del Servet, el hombre se sometió a las pruebas de alcohol y arrojó dos resultados positivos: 0,86 mg/l en la primera y 0,91 mg/l, en la segunda. Los agentes le ofrecieron la posibilidad de hacer una análisis de sangre para contrastar los resultados, pero el infractor se negó. Y para la jueza, hay pruebas suficientes para condenarlo por el delito de conducción etílica.
Pero tal y como pedía la Fiscalía, también ha sido castigado por conducir con el carné retirado (tenía prohibido ponerse al volante hasta el 6 de diciembre de 2022). Sabedor de que iba borracho y sin carné, cuando el coche patrulla le dio el alto, Petre Pirjolea pisó el acelerador. Al hacerlo puso en riesgo no solo su vida, sino también la de los agentes que intentaban darle alcance, ya que en su huida se saltó tres semáforos en rojo, invadió un carril bici y circuló más de 150 metros en dirección contraria.
El Mercedes será decomisado
El ministerio público pretendía que el conductor fuera condenado también por atentado, ya que cuando los policías cruzaron su coche delante del Mercedes del fugado para cortarle el paso, este arremetió contra ellos. Sin embargo, la magistrada se ha alineado finalmente con la tesis de la defensa, a cargo del letrado Armando Martínez, quien solicitó en el juicio que esta acción, como mucho, fuera penada como desobediencia, por entender que su cliente no tenía ninguna intención de lesionar a los funcionarios. Lo que sí ha decidido la juez es decomisar el vehículo del acusado, por ser reincidente y considerarlo instrumento del delito.
La temeraria fuga que llevará a prisión a Petre Pirjolea se produjo de madrugada, cuando apenas había vehículos y gente por las calles de Zaragoza. No hubo que lamentar por tanto más víctimas que el propio fugado, pero sí se produjeron importantes daños materiales, ya que este chocó con ocho vehículos, incluido el coche patrulla que lo perseguía.
Los hechos se produjeron el pasado 1 de diciembre, justo un mes después de que el conductor suscribiera una póliza con Pelayo. Sin embargo, la compañía se negaba a hacer frente a los daños porque el banco había devuelto el primer recibo del seguro por falta de fondos. Al final, fueron citados al juicio tanto Pelayo como el Consorcio de Seguros para dirimir quién debía ser declarado responsable civil. Y finalmente la juez ha condenado a la aseguradora, ya que no había enviado una carta certificada al acusado comunicándole la rescisión del contrato.
