Suspendido un festival taurino en Figueruelas al herir dos reses a tres de los participantes

El concurso de roscaderos de Figueruelas, celebrado el pasado domingo por la tarde, último día de las fiestas patronales, se suspendió al herir dos reses a tres de sus participantes. El más grave recibió una cornada en la cara y tuvo que ser trasladado al hospital Miguel Servet de Zaragoza, donde permanece ingresado en la planta de maxilofacial con pronóstico reservado. Los otros dos fueron atendidos y trasladados al Clínico con diversas contusiones y traumatismos.

El festejo taurino comenzó el domingo a las 19.15 en esta localidad de la Ribera Alta del Ebro, que celebraba desde el pasado miércoles sus fiestas del Santo Cristo. Ocho cuadrillas participaban en el concurso de roscaderos, un tipo de tienta en el que los grupos defienden las acometidas del astado con un cesto de mimbre. En torno a las 20.15, cuando salió al ruedo el quinto equipo, un animal arremetió contra el roscadero. La cuadrilla no pudo contener la embestida y acabó en el suelo. Para protegerse, intentaron sujetar a la vaca, pero esta hirió a dos de los integrantes del equipo. Uno de ellos, I. L. L., de 23 años, recibió una cornada en la cara, que le produjo un traumatismo facial con herida abierta en el labio superior y la zona nasal. Su compañero, J. B. G., de 28 años, sufrió varios golpes del astado, que le ocasionaron un fuerte traumatismo torácico.

Cuando el equipo médico estaba atendiendo a estos dos heridos, salió otra cuadrilla al ruedo. Entonces, A. C. L., de 22 años, sufrió una posible luxación de rodilla, que requería de su traslado también a un centro hospitalario después de inmovilizarle.

Las dos ambulancias con las que Cruz Roja Alagón cubría los festejos –una Soporte Vital Avanzado (UVI móvil) y una Soporte Vital Básico– tuvieron que transportar a los heridos a Zaragoza, después de estabilizarlos en Figueruelas. I. L. L. fue llevado al Miguel Servet, donde ayer por la tarde seguía ingresado en la Unidad Clínica de Cirugía Oral y Maxilofacial del Hospital Miguel Servet. Los otros dos jóvenes fueron trasladados al Clínico, donde, tras ser atendidos, recibieron el alta médica esa misma noche, según explicaron fuentes del Departamento de Salud del Gobierno de Aragón. El alcalde de Figueruelas, Luis Bertol, confirmó que el festejo taurino tuvo que ser suspendido, ya que es obligatorio que en el lugar de la celebración esté siempre presente al menos una ambulancia. El despliegue sanitario para este concurso de roscaderos constaba de ocho miembros: un médico, un enfermero y varios técnicos y socorristas.