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El juez prorroga un mes más el secreto de las diligencias del crimen de Movera
La Policía Nacional detuvo en junio a diez personas por estos hechos y dos de ellas ingresaron en prisión.
El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional logró esclarecer el pasado mes de junio la autoría del crimen de Movera, del que fue víctima María Marian, de 28 años, el 21 de noviembre de 2018. La Policía detuvo por estos hechos a diez personas, tres de las cuales ingresaron en prisión como presuntos autores materiales del homicidio. Sin embargo, los investigadores no quieren dejar cabos sueltos en unas pesquisas de máxima complejidad en las que han invertido siete meses. De ahí que el juez que instruye la causa haya decidido prorrogar el secreto de las diligencias.
El magistrado ha decidido mantener la medida, al menos, hasta el próximo 10 de agosto, por lo que las defensas personadas en la causa no tendrán acceso a las actuaciones hasta entonces. El no conocer con detalle los hechos por los que se les investiga llevó a muchos de los encausados a negarse a declarar en sede judicial. Y todo apunta a que seguirán sin hacerlo hasta que se acuerde el levantamiento del secreto. La única que tiene información completa del caso es la Fiscalía.
Un guante, prueba clave
Un simple guante blanco de látex. Esa fue la prueba clave sobre la que pivotó la brillante investigación policial que permitió detener a los diez presuntos responsables del crimen de Movera. De hecho, el análisis de los restos de ADN hallados en ese pequeño trozo de plástico permitió dar con Aivaras S., de 38 años y origen lituano, al que finalmente el Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Aragón identificó como uno de los sicarios que acabaron con la vida de la joven.
Además de para este hombre, la jueza de guardia decretó prisión provisional para Jesús J. M. y Félix T. El resto de los investigados quedaron libres.
