La delegación zaragozana que regresó de China hace pocos días se ha traído un buen número de proyectos bajo el brazo. El alcalde Santisteve hizo ayer balance del viaje y aprovechó para anunciar algunas novedades que estrecharán los lazos de la capital del Ebro con el gigante asiático. ¿El botón de muestra? Aunque quizá sea lo más anecdótico, en los próximos días se rotularán las zonas más turísticas de la ciudad con caracteres mandarines porque el turismo chino "ha crecido un mil por cien" –calculó el alcalde– y la intención es que lo siga haciendo.

Ayer Santisteve puso el acento en la logística y el transporte de mercancías, y anunció que habrá un vuelo directo entre Zaragoza y la ciudad china de Wuhan que podría comenzar a operar en mayo con el proveedor DSV.

"Será un complemento al impulso de transporte ferroviario, a través de la denominada ‘ruta de la seda’ y de la vía marítima", explicó el primer edil, al tiempo que destacaba las bondades ecológicas del corredor continental ferroviario y de la terminal marítima de Zaragoza (TMZ). "Estamos sacando de las carreteras miles de camiones contaminantes gracias a nuestra posición geoestratégica", afirmó. El gerente de la TMZ, Ramón Adé, ofreció datos: al mercado chino se exportan unos 50.000 contenedores anuales por la vía que combina el tren hasta un puerto para seguir ruta por barco. Para Adé, el que Zaragoza se adentre la denominada ‘ruta de la seda’ permitirá "mantener una relación fluida con ciudades chinas como Wuhan y ser una alternativa en eficiencia y competitiva para las empresas".

El gerente de Mercazaragoza, Constancio Ibáñez, también destacó que el periplo chino ha sido "muy provechoso" y apuntó que el "reto de la terminal marítima es convertirla en una potente terminal agroalimentaria de exportación hacia China". Ibáñez recalcó que la zaragozana es la primera estación de España con 150.000 teus (medida por contenedores) anuales, de los que un tercio se exporta a China. El gerente apostó por que la TMZ se especialice en agroalimentación y avanzó que se están llevando a cabo contactos con empresas navarras de congelado para crear un gran centro de almacenamiento de producto congelado que iría a China vía ferrocarril.

Con estos ambiciosos planes, no es de extrañar que el único ‘pero’ de la TMZ es que se puede quedar pequeña enseguida y para poner remedio se está ultimando una ampliación de Mercazaragoza cercana a los 100.000 metros cuadrados. Santisteve también explicó que el viaje institucional sirvió para poner en común proyectos docentes (en Zaragoza hay 500 estudiantes chinos y la mayoría se matriculan en la Escuela de Turismo), y aseguró que el Instituto Confucio facilitará el aprendizaje del idioma chino con la previsión de alcanzar una matrícula anual de mil alumnos.