Intercambio de experiencias entre los alumnos del colegio Joaquín Costa y los residentes del Hogar Doz

Los niños de sexto curso de Educación Primaria del colegio Joaquín Costa de Tarazona tienen todos los viernes una cita con los residentes del Hogar Doz. Han cambiado su clase de ‘Valores sociales y cívicos’ por una convivencia en la que se benefician ambas partes.

La colaboración era habitual en una época tan señalada como es la Navidad, pero este curso han dado un paso más para estrechar su relación. “Pensábamos que podía ser interesante tener más momentos de convivencia. Cada vez vivimos de una manera más compartimentada y ya no es tan habitual que varias generaciones convivan en la misma casa, por eso nos pareció buena idea que compartieran momentos”, recuerda la directora del centro escolar, Ana Urriza.

Se propuso de manera optativa y la respuesta del alumnado fue positiva. “Lo cogieron con ilusión y cada semana vamos probando actividades, compartiendo a través de juegos o haciendo máscaras para carnaval… se trata de realizar diferentes actividades para que tengan que hacer cosas juntos”, detalla Urriza.

Los niños aprenden respeto, paciencia y otros valores, a la vez que suponen un soplo de aire fresco para los residentes. “Los mayores están encantados porque de normal están en un marco con unas rutinas y una convivencia siempre con las mismas personas, así que el que venga gente tan joven les llena de alegría”, añade Amparo Muñoz, terapeuta ocupacional del Hogar Doz.

Después de las primeras semanas en las que se organizaron actividades para que niños y mayores se conocieran y se establecieran lazos, ahora se están planificando iniciativas más variadas. Y es que al tener un balance tan positivo, esta cita semanal va a continuar desarrollándose. Por delante esperan actividades de estimulación cognitiva, o talleres de cocina, por ejemplo.