zaragoza

Condenado por un cabezazo en un partido de fútbol en Utebo

Tras el informe de Intervención, el concejal de Cultura reta a los grupos a acudir a los juzgados si creen que hay delito.

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Los hechos ocurrieron durante un partido en el campo de fútbol de Santa Ana, en Utebo.
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La violencia en el deporte y en el fútbol en particular ya no solo se castiga con unos cuantos partidos de suspensión. De hecho, cada vez son más las agresiones que se denuncian ante la Policía o en los juzgados y que terminan con una sentencia condenatoria. Así le ha ocurrido a un joven zaragozano de 26 años, que tendrá que pagar 3.400 euros por el cabezazo que propinó a un rival durante un partido disputado en Utebo.

Como recoge la sentencia del Juzgado de lo Penal número 6, los hechos se produjeron el 1 de octubre de 2017 en el campo de fútbol municipal de Santa Ana. En un momento dado, cuando el juego estaba parado, un futbolista del equipo visitante se acercó a uno del Utebo y le lanzó un fuerte cabezazo en la nariz, provocándole una herida inciso-contusa en el pómulo izquierdo y la fractura de huesos propios con desplazamiento.

Las lesiones impidieron seguir jugando a la víctima, que precisó de tratamiento farmacológico, reposo y el uso de tiras adhesivas para suturar la herida. Según el informe forense, su recuperación se prolongó durante 20 días, cuatro de los cuales fueron impeditivos. Como secuelas, al jugador se le ha apreciado una alteración de la respiración por deformidad ósea o cartilaginosa.

Las pesquisas del caso recayeron en el Juzgado de Instrucción número 5 de Zaragoza, que tras calificar la Fiscalía los hechos como un presunto delito de lesiones dictó un auto de apertura de juicio oral. Inicialmente, el ministerio público proponía que el encausado fuera condenado a una multa de 2.400 euros, así como al pago de 720 euros por las lesiones y otros 800 por las secuelas sufridas por el denunciante.

Sin embargo, un acuerdo entre las partes –incluida la acusación particular– hizo que la vista ni siquiera llegara a celebrarse, ya que el futbolista que pegó el cabezazo a un oponente se reconoció autor del delito de lesiones. Al hacerlo, consiguió que la Fiscalía apreciara la atenuante de reparación del daño y rebajara la petición de pena.

Al margen de la multa correspondiente al delito, que se ha fijado en 900 euros (al principio se pedían 2.400), el agresor tendrá que indemnizar a la víctima con otros 2.500 euros, habiendo consignado con carácter previo al juicio ya mil. En cualquier caso, para hacer efectivas estas cantidades, la juez ha permitido al condenado que lo haga mediante cuotas mensuales de 500 euros. Al tratarse de un acuerdo, la sentencia es firme y contra ella no cabe recurso.

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