Los contenedores de la calle Tomás Anzano ya no molestan a sus vecinos

El Ayuntamiento de Zaragoza ha decidido cambiar los depósitos de ubicación ante las reiteradas quejas de los residentes por la continua acumulación de basura en las puertas de sus casas.

Los contenedores estaban ubicados justo a las puertas de varias viviendas
Los contenedores estaban ubicados justo a las puertas de varias viviendas
Heraldo.es

Las quejas de los vecinos de la calle Tomás Anzano, en el barrio de Montecanal, por la ubicación de unos contenedores de basura en las puertas de sus casas, han surtido efecto. El Ayuntamiento de Zaragoza ha retirado recientemente los depósitos y los ha trasladado a otro lugar para terminar con las molestias que generaban entre los residentes más cercanos.

Los vecinos llevaban varios años reclamando el cambio de ubicación de los contenedores, ya que consideraban que la actual no era la adecuada porque era habitual que la basura se amontonara a su alrededor llegando a bloquear parte de la acera. Su nuevo emplazamiento, en la calle Lorenzo Normante, parece haber puesto fin a este problema. “Los han puesto cerca de donde estaban al principio, detrás del Eroski, que era donde tenían que haber estado siempre”, explica una de las vecinas afectadas. Según esta residente, se trata de una calle con poca circulación y en la que ningún vecino se ve perjudicado, ya que no hay viviendas, sino que va a dar a la parte trasera del supermercado y a un aparcamiento. “He pasado un par de veces por ahí y no hay basura fuera, salvo algún cartón grande. Esto demuestra que la ubicación anterior no era la correcta”, considera esta vecina.

Además de las inmediaciones de la gran superficie, quienes viven en la zona también propusieron mover los contenedores junto al IES Valdespartera, aunque el consistorio negó este emplazamiento alegando que pertenece a otro barrio.

Para conseguir que sus quejas llegaran a oídos del consistorio, una de las vecinas afectadas ha tenido que mandar varios escritos y quejas a través de su página web de sugerencias. Además, fue haciendo un seguimiento vía Twitter del estado que presentaban los contenedores y sus alrededores. “Llevamos años con este problema y la contestación siempre era que los contenedores no se podían cambiar de sitio”, explica. Por eso están “muy contentos” de que su lucha no haya sido en vano y de que la Oficina del Espacio Urbano y Gestión de Residuos estudiara otras alternativas.

Malos olores, ruidos y conatos de incendio

Los vecinos aseguran que los contenedores que tenían en las puertas de sus casas generaban malos olores –especialmente en verano- y, en alguna ocasión, se han encontrado con sorpresas desagradables, como la presencia de ratas o incluso de basura ardiendo.

La razón por la cual estos depósitos se saturaban es, según una de las vecinas, la falta de contenedores convencionales en el barrio de Valdespartera. Allí, la mayoría de los contenedores están soterrados y los bultos de gran tamaño no caben, por lo que la residente cree que muchos se acercaban a esta zona de Montecanal para tirar sus residuos. “La nueva ubicación evita lo que ocurría antes, pero no han solucionado el problema de los contenedores de Valdespartera”, considera.

Ahora, esta vecina espera que la imagen de la basura acumulándose bajo los contenedores sea cada vez menos frecuente en el conjunto de la ciudad. “Esto pasa en muchas zonas de Zaragoza. Hay que luchar por que sea más limpia y acogedora, ya no de cara al visitante, sino de cara al usuario de la ciudad”, concluye.

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