Detenido un joven de 26 años como presunto autor del crimen de la maleta en Oliver

El fallecido es un madrileño de 48 años cuya desaparición se denunció semanas antes. El juez mantiene secretas las diligencias, pero todo apunta a que no habría más personas implicadas en el homicidio.

Aparece un cadáver en una maleta en el barrio Oliver
Aparece un cadáver en una maleta en el barrio Oliver
José Miguel Marco

El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional ha conseguido resolver en apenas tres días el crimen de la maleta, del que este martes se confirmó oficialmente que fue víctima un madrileño de 48 años -J. M. V.- cuya desaparición había sido denunciada a mediados de diciembre. Según fuentes de la Jefatura Superior de Aragón, el presunto autor material del homicidio sería un joven de 26 años del que todavía no ha trascendido la identidad.

Tras una serie de averiguaciones, los investigadores han llegado a la conclusión de que fue él quien utilizó un objeto contundente para golpear en la cabeza y dar muerte a la víctima, cuyo cadáver ocultó después en una maleta que abandonó en una vivienda de la finca ubicada en el número 1 de la calle Vía Verde del barrio Oliver de Zaragoza.

Pese a la detención del presunto homicida, el juez instructor mantiene secretas las diligencias del caso, por lo que es poco lo que ha trascendido respecto al móvil del crimen. En cualquier caso, parece que agresor y víctima se conocían y mantuvieron un encuentro en el piso 4º D a lo largo de la semana pasada. Cabe recordar que fue el sábado a primera hora de la mañana cuando la central del 091 recibió una llamada comunicando el hallazgo del cadáver.

Por los motivos que fueran, el más joven de los hombres atacó al otro, lo mató y no se le ocurrió mejor manera de deshacerse del cuerpo que colocarlo en posición fetal dentro de una maleta. El hecho de que el fallecido apareciera desnudo es una circunstancia que no pasó por alto a la Policía, pero habrá que esperar al levantamiento del secreto de las actuaciones para dar una explicación a este hecho.

No se esperan más arrestos

Como informó HERALDO, el Grupo de Homicidios logró identificar pronto a la víctima. Al margen de que pudieran encontrar algún tipo de documentación personal en el lugar del crimen, la familia del fallecido había presentado hace algunos días una denuncia por desaparición en una comisaría de Madrid. Por lo tanto, al tomar las huellas al cadáver, saltarían pronto las alarmas.

Fue el domingo por la mañana cuando se practicó la autopsia al cadáver del madrileño en el Instituto de Medicinal Legal de Aragón (INMA). En principio, no presentaba heridas de arma blanca o de fuego y parece que las lesiones que provocaron su muerte fueron las que tenía en la cabeza, que habrían sido efectuadas con algún objeto contundente y sin aristas.

Según fuentes próximas a la investigación, con la detención del presunto homicida se darían por esclarecidos los hechos, ya que no se prevén más detenciones. En cualquier caso, el hecho de que se mantengan secretas las diligencias no permite descartar todavía nada.

Para los residentes del inmueble donde se halló la macabra maleta, todo resultaba el domingo bastante extraño, ya que pese al trajín de inquilinos de la cuarta y última planta -donde los dos únicos pisos están en alquiler- se trata de una comunidad "muy tranquila". "Sabemos que cada año pasan por el 4º D cuatro o cinco personas distintas, pero ninguno ha dado nunca problemas", explicaba uno de los vecinos más veteranos de la finca.

Las dos viviendas de la tercera planta están vacías, pero ni en los primeros ni en los segundos escucharon ruidos extraños en los días previos al crimen. Preguntado por la persona que actualmente residía en el domicilio donde ocurrieron los hechos, un vecino explicó que se trataba de un varón con barba y bigote que "parecía iraquí". Lo que no tenían claro es si este hombre subarrendaba después algunas de las habitaciones del piso.Tras pasar la Nochebuena en los calabozos de la Policía Nacional, el supuesto homicida fue trasladado este martes por la tarde a la Ciudad de la Justicia de Zaragoza. Allí estaba previsto que le tomara declaración, asistido por un abogado de oficio, la titular del Juzgado de Instrucción numero 10, en funciones de guardia, para decidir si lo enviaba o no a la prisión de Zuera.

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