Fuentes de Jiloca expone su belén de 300 piezas de plastilina

Fuentes de Jiloca ya expone su belén de Navidad, compuesto por más de 300 piezas de plastilina y creado por los vecinos de esta pequeña localidad de la comarca de la Comunidad de Calatayud.

La composición se exhibe en el Ayuntamiento hasta el 7 de enero y para su elaboración se ha contado con personas de todas las edades. Prácticamente todo el pueblo, en el que viven de manera habitual apenas cien vecinos y siete niños en edad escolar, se ha volcado con este proyecto.

Además de la peculiaridad del material con el que se han hecho las figuras, en plastilina, el belén de Fuentes de Jiloca es original por las escenas que representa. Y es que se ha querido reflejar en él el día a día en la localidad. Así, se puede ver una partida de guiñote en el casino, la estación de tren o la iglesia mudéjar, conocida como la catedral del Jiloca.

El objetivo de esta acción, que se ha propuesto por primera vez este año es dinamizar la vida en el pueblo. La iniciativa ha sido impulsada por un grupo de vecinos que, con el apoyo del Ayuntamiento, organizan actividades, en especial para los puentes festivos, cuando quienes no residen en la localidad, acuden a pasar el fin de semana.

Lo que ha acabado siendo un gran belén de 300 figuras, surgió como un pequeño taller de plastilina celebrado el puente de la Constitución. A la iniciativa se fueron sumando más personas, además de la que asistieron aquel día a la cita, que con sus aportaciones han creado esta composición. Los autores han sido principalmente familias, algunas de fuera de Aragón que han enviado sus creaciones por mensajería.

En total, según indican desde la organización, alrededor de 30 personas han participado en la acción. “Estamos muy contentos y sorprendidos de la buena acogida”, asegura Pilar Ayerbe, una de las promotoras de este tipo de iniciativas en Fuentes de Jiloca.

Como resultado, un belén nada común donde han quedado reflejadas las escenas típicas de la localidad. “El mismo día de la celebración del taller, las personas mayores acudieron a verlo y sus caras eran de ilusión, al ver representado su pueblo”, explica Pilar.

Tras este éxito, tanto de participación como de resultados, el grupo organizador ya está pensando en la siguiente acción. Será el 31 de diciembre, con la tercera edición de la San Silvestre, una carrera popular que propone un recorrido corto y sencillo para participar en familia y ocupar la última tarde del año.