El Gobierno de Aragón ha iniciado obras de mantenimiento y mejora en el centro de salud de Borja, afectado por una plaga de termitas y por problemas de aislamiento. Los trabajos, adjudicados a finales de octubre, ascienden a 186.216 euros, según fuentes de Sanidad. Las consultas seguirán con normalidad.

El alcalde, Eduardo Arilla, explicó que la actuación de remodelación consiste en mejorar el aislamiento de la cubierta, bajar el techo del gimnasio de rehabilitación, pintar todo el edificio y sustituir las puertas y ventanas de madera por otras de aluminio (se incluirá también la entrada principal y la de urgencias).

El centro sufre desde hace bastante tiempo una plaga de termitas. Hace tres años se colocaron unas cajas adosadas a la carpintería para frenar el ataque de los xilófagos. "Tanto el deterioro visual como estas cajas resultan inadmisibles para un centro de salud", según recoge la memoria valorada. Los marcos se sustituirán también por otros de aluminio, para evitar así la aparición de termitas y carcoma.

Por otra parte, el gasto en climatización ahora es muy elevado, al no haber aislamiento. "Con estas mejoras se conseguirá un ahorro importante de energía y climatización y una imagen digna para un centro médico que atiende a más de 10.000 usuarios de la zona", indicó el regidor. Esta intervención pondrá fin a las quejas por frío en el gimnasio donde se hacen los ejercicios de rehabilitación, que en invierno no alcanza la temperatura adecuada. También se prevé la sustitución de los radiadores, que son de chapa de acero y tienen casi 30 años.

El inmueble se construyó en 1974, pero estuvo abandonado unos años, por lo que fue desvalijado y ocupado por quien pasara por allí, dado que está en las afueras. En 1989 se ejecutó una importante obra para convertirlo en centro de salud y en 2005 se llevó a cabo su ampliación.