Una asistenta niega haber robado 313.410 € del chalé donde trabajaba en Zaragoza

La Fiscalía le acusa de facilitar información a dos compinches para perpetrar el golpe en una urbanización de la capital aragonesa. Para ella pide una condena de 6 años de cárcel y para ellos, sendas penas de 5.

La palanca o 'pata de cabra' dorada que encontró la Policía en el chalé resultó fundamental para resolver el caso.
La palanca o 'pata de cabra' dorada que encontró la Policía en el chalé resultó fundamental para resolver el caso.
HA

la Audiencia de Zaragoza sentó ayer en banquillo de los acusados a una asistenta del hogar por su presunta participación en el asalto perpetrado al chalé de la Venta del Olivar donde llevaba diez años trabajando y del que se llevaron un botín de 313.410 euros. La Policía cree que Kenia E. B., para la que la Fiscalía pide 6 años de prisión, planificó el golpe junto a otros dos hombres, que se enfrentan a sendas condenas de 5 años. Sin embargo, solo uno de ellos, Víctor V., pudo ser juzgado, ya que el otro, Toader B., se encuentra en paradero desconocido.

Cuando se produjeron los hechos, el 23 de abril de 2016, la encausada se hallaba con el matrimonio propietario del chalé en una segunda residencia que poseen en Murcia. De ahí que la empleada insista en que nada tiene que ver con el asalto. Su abogada, Olga Oseira, manifestó ante el tribunal que no existe ninguna prueba –en forma de llamada telefónica o contacto– que vincule a su clienta con los otros dos sospechosos. Para tratar de demostrar que la acusada no se enriqueció de forma ilícita, ha aportado también una serie de contratos que evidencia que esta sigue trabajando limpiando escaleras.

Según los denunciantes, antes del asalto al chalé, la mujer ya se había aprovechado del puesto para llevarse joyas que luego vendió en tiendas de empeño. Además, tanto la acusación pública, como la particular, que ejerce Beatriz Perulán, afirman que son muchos los indicios que señalan a la acusada. Y lo cierto es que las cámaras de seguridad de la casa captaron una imagen de la mujer fotografiando la central de seguridad.

Se olvidaron una ‘pata de cabra’

Cuando la Policía llegó al chalé vio que los delincuentes se habían olvidado ‘pata de cabra’ con la que arrancaron la caja fuerte. Era una herramienta singular, ya que era de color dorado. Al examinarla, comprobaron que tenía una pegatina de la tienda donde se había comprado: justo un día antes del asalto en el Bauhaus de Zaragoza. El visionado de las cámaras del establecimiento permitió dar finalmente con los dos hombres que supuestamente colaboraron con la mujer. El abogado del único que fue al juicio, Francisco Javier Barriendo, mantuvo que puede haber indicios, pero no pruebas que permitan condenar.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión