La Policía Nacional y la Guardia Civil desplegaron anoche un importante dispositivo en torno al barrio zaragozano de Movera para tratar de localizar a las personas que, en torno a las siete de la tarde, abrieron fuego contra una mujer, de 28 años y origen rumano, a las puertas de su casa, en la calle Torre de Urdaiz número 26. La víctima, identificada con las iniciales M. M., no falleció en el acto, pero las graves lesiones sufridas le acabaron costando la vida, ya que nada pudieron hacer por ella las asistencias médicas.

Según las primeras pesquisas, los autores del crimen podrían ser dos hombres que habrían huido a toda prisa en su coche tras efectuar, al menos, un disparo.De ahí que anoche se movilizaran numerosas patrullas para peinar tanto el barrio de Movera como el de Pastriz, que se encuentra muy próximo. La Policía Nacional, que se ha hecho cargo de la investigación, también montó varios controles en las carreteras de la zona para tratar de localizar a los homicidas.

Este miércoles por la noche, la Jefatura Superior de Aragón no se atrevía a adelantar el posible móvil del asesinato, ya que los agentes del Grupo de Homicidios seguían inspeccionando el lugar de los hechos para recoger la mayor cantidad posible de pruebas. Hasta allí se desplazó también la comisión judicial con el forense de guardia, que tras una primera inspección ocular, hoy practicará la autopsia a la fallecida para concretar cuántos impactos de bala recibió.

Lo que parece claro es que la muerte de esta vecina de Movera había sido planeada, ya que los pistoleros sabían la hora a la que tenía que llegar a su casa y la aguardaron allí para abrir fuego en cuanto se bajó de su vehículo. Según fuentes policiales, junto a la víctima viajaba también en el coche su hermana, que no resultó herida. Por ello, todo apunta a que el único objetivo era la fallecida. Según fuentes del entorno, antes de acudir a casa, había sido visto haciendo algunas compras en el barrio de La Cartuja.

Al tratarse de una urbanización tranquila, en la que apenas viven unas pocas familias, el ruido del tiroteo hizo que los vecinos salieran enseguida asustados a la calle. Por ello, los funcionarios del Grupo de Homicidios se entrevistaban anoche con ellos para tratar de recopilar datos, tanto sobre los huidos como del vehículo en el que se dieron a la fuga.

Posible ajuste de cuentas

Todavía es pronto para descartar hipótesis, pero parece que uno de los posibles móviles del crimen podría ser un ajuste de cuentas. De hecho, algunas fuentes hablaban de que el compañero sentimental de la fallecida, de nacionalidad española, cumple condena en prisión porque fue relacionado con una plantación de marihuana. Al parecer, este tenía un permiso para salir hoy del centro penitenciario de Zuera e iba a acudir al médico con la ahora fallecida. En cualquier caso, este dato no pudo ser confirmada anoche oficialmente.

Preguntada por lo ocurrido, la alcaldesa de Movera, Esperanza Calvazo, lamentaba "profundamente" lo ocurrido, pero apenas tenía información. De hecho, solo podía confirmar que la urbanización donde se produjo el tiroteo es una de las que habitualmente se inunda cada vez que se desborda el Ebro "Es por ello que casi no queda gente viviendo por allí", decía. La regidora aguardaba a tener más datos para poder acordar alguna medida en señal de duelo.