En la tarde del 26 de mayo de 1979, un artefacto explosivo hizo saltar por los aires la madrileña cafetería California 47, causando la muerte en el acto de nueve personas y heridas de diversa consideración a otras 60, además del derrumbamiento del edificio, con unos daños tasados en casi 34 millones de pesetas de la época. El 26 de julio, Carmen López Anguita y Alfonso Rodríguez García, presuntos miembros de los GRAPO y dos de los once terroristas de la organización más buscados por la Policía, fueron detenidos en la plaza de Santa Bárbara de Madrid.

Tras su detención, ambos reconocieron los ser los autores del atentado, así como su participación directa en otros seis actos terroristas: el ametrallamiento de dos agentes de la Policía Nacional en el polideportivo del madrileño barrio de La Elipa, el ametrallamiento de una pareja de la Guardia Civil en la calle de Pedro Alonso, en el barrio de Canillas, y el atentado contra el general de brigada Agustín Muñoz Vázquez, así como el asesinato de un policía nacional de guardia en la comisaría del distrito de Universidad, un inspector de Policía en el barrio de Moratalaz y un policía nacional en la calle Numancia.

El 27 de abril de 1981, Carmen López Anguita (Madrid, 25 de junio de 1958) fue condenada a 25 años de prisión por el atentado de La Elipa, y a otros cuatro por su participación en el asesinato, el 9 de abril de 1979, de Olegario Collazo Melón, a quien la banda armada confundió con un inspector de Policía. Mientras cumplía condena, en 1982, fue juzgada por la matanza de la cafetería California 47 y sentenciada a 280 años de reclusión.

El 30 noviembre de 1989, una treintena de presos de los GRAPO internos en diferentes centros penitenciarios, entre los que se encontraba López Anguita, iniciaron una huelga de hambre para conseguir su reunificación en una sola prisión. En enero de 1990, siete de ellos presentaban una situación “precomatosa”, según Instituciones Penitenciarias, y López Anguita, ingresada en el hospital bilbaíno de Basurto, llegó a sufrir “desnutrición severa, postración, vómitos y pronóstico grave”. La terrorista pasó varios meses sin probar bocado, aunque durante un tiempo fue alimentada por vía intravenosa por orden del juez.

Carmen López Anguita abandonó la cárcel en 1999 tras cumplir 20 años de prisión. Una vez en libertad, se incorporó a la militancia del Partido Comunista de España reconstituido (PCE-r), considerado el brazo político de la banda terrorista GRAPO.

El 26 de noviembre de 2002 fueron detenidos varios miembros de la organización criminal en Madrid y Valladolid cuando preparaban una estructura estable de los GRAPO en la capital de España. La operación fue una continuación de la iniciada en julio de ese año, cuando fue desmantelada la cúpula de la organización y los comandos operativos. Entre los arrestados en Madrid figuraba Carmen López Anguita. La terrorista cumplió cuatro años de cárcel y fue puesta en libertad condicional el 19 de abril de 2006, pero volvió a ser detenida el 20 de agosto de 2007 para cumplir ocho años y nueve meses de encarcelamiento por formar parte del entramado del PCE(r). Salió del penal de Teixeiro-Curtis (La Coruña) el 19 de diciembre de 2012, tras un total de 29 años en prisión en más de 20 cárceles de todo el país.

Los GRAPO (Grupos de Resistencia Antifascistas Primero de Octubre) nacieron en 1975 como brazo armado del Partido Comunista Español Reconstituido (PCE-r) y se les atribuye 87 asesinatos, la mayor parte en las provincias de Madrid (43) y Barcelona (17). Una de las acciones atribuidas a los GRAPO pendiente de resolver es el secuestro el 27 de junio de 1995 en Zaragoza del empresario aragonés Publio Cordón. Aunque los terroristas anunciaron su liberación el 17 de agosto de ese año a cambio de 400 millones de las antiguas pesetas, el empresario aún permanece en paradero desconocido.