Santisteve justifica el vídeo de Híjar y lo enmarca en el "enfado ciudadano"

El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, ha considerado que las relaciones con la DGA "no deberían estar rotas" por un vídeo que, pese a que "puede ser un tanto provocador", se enmarca en un ambiente de "enfado" de los ciudadanos, que tienen motivos para estar "indignados".

Santisteve se refería al vídeo en el que el concejal de Vivienda y Deporte, Pablo Híjar, se comía un recibo del Impuesto sobre la contaminación de las aguas (ICA), lo que provocó la ruptura de relaciones por parte del Gobierno de Aragón.

Además, ha indicado en declaraciones a los medios que están pendientes de que el presidente Javier Lambán desbloquee la reunión de la Comisión Bilateral entre Gobierno autonómico y Consistorio, después de que fuera retrasada por "problemas de agenda" de los dirigentes municipales.

Así, se ha mostrado dispuesto a reunirse "si es mañana, mañana", ha subrayado.

Sobre el ICA, ha instado a hablar del fondo, de por qué los zaragozanos están "indignados" con el pago de este tributo y de que el Gobierno de Aragón decidiera girar el recibo de 2017 cuando estaba inmerso en un proceso de negociación.

A su juicio, el Ejecutivo de Lambán no está construyendo el mejor marco para negociar y ha criticado que pretenda "imponer" y dejar de invertir 40 millones de euros en Zaragoza mientras a sus vecinos se les pretenda sustraer 20 millones por unas aguas que ya depura el Ayuntamiento, pero ha confiado en que finalmente impere el "sentido común".

El alcalde ha negado también que la DGA haya implantado el modelo de la Red de Agua Pública de Aragón (RAPA), como aseguró el pasado martes el presidente, y ha aseverado que no ha visto "absolutamente ningún cambio" en este aspecto.

De haberlo hecho, ha concluido, habría reformado la ley, habría implantado un sistema de pacto y convenio con el Consistorio, se habría sentado a hablar y habría establecido un precio por metro cúbico del agua conforme a la media nacional para que "los desfases y dispendios económicos" que hubo con los "pufos" del Plan de Saneamiento y Depuración no se volvieran a repetir