El centro cultural de los depósitos de Pignatelli se estrenará el próximo mes

Los antiguos depósitos subterráneos de Pignatelli reabrirán sus puertas al público el próximo mes de noviembre como centro cultural. Las obras de rehabilitación del espacio encargadas por el Ayuntamiento de Zaragoza con un presupuesto de 636.000 euros avanzan a buen ritmo, según fuentes municipales. El objetivo es devolver a la ciudad una de las salas de exposiciones y eventos más utilizada en la década de los ochenta, pero que hace años que se mantiene cerrada al público.

Los trabajos –adjudicados a la empresa constructora Mariano López Navarro– comenzaron antes del verano, y se han centrado en acondicionar los baños, salas y zonas expositivas del recinto, así como incorporar las medidas de seguridad necesarias y la climatización y adecentar paredes, techos y suelos. Además, ha habido que intervenir en los accesos. "La rampa es necesario modificarla para adecuar sus pendientes a la norma de accesibilidad. Las escaleras exteriores se encuentran deterioradas e incumplen las dimensiones y alturas máximas", advertía el proyecto de obra.

Aunque el recinto original cuenta con 1.500 metros cuadrados, la recuperación será parcial. Una vez concluidos los trabajos, los programadores culturales podrán llevar sus exposiciones y eventos a un recinto de 865 metros cuadrados, que incluyen una sala de 576 y otros 225 en dos vestíbulos. En principio, los usos previstos son "áreas de ventas, salones de uso múltiple, museos, galerías de arte, ferias y exposiciones", recoge el proyecto. En cambio, quedan excluidos –salvo excepciones puntuales– actuaciones y usos de discoteca o similar.

Descentralización

El concejal de Urbanismo, Pablo Muñoz, explica que "la intención del Ayuntamiento es descentralizar la programación de la ciudad creando nuevos polos culturales en los barrios" con un nuevo espacio municipal que dé servicio, junto con la Harinera, a San José, Torrero, Centro y Universidad. "Se trata de un nuevo equipamiento versátil y polifuncional en una zona con pocos espacios públicos de convivencia", argumenta el edil.

Su acondicionamiento es parte del plan de ampliación del parque de Pignatelli, donde se creará un gran espacio verde con importantes equipamientos a cambio de recalificar suelo público para la construcción de 107 viviendas –77 libres y 30 protegidas–. La intervención afectará a una enorme superficie de 37.720 metros cuadrados, de los que 10.600 serán dedicados a uso residencial. El proyecto contempla, además, abrir una biblioteca, un centro de convivencia y otro de día y una ludoteca. Asimismo, en la parte más cercana a la actual entrada del parque desde Sagasta, se levantarán un centro cívico y pistas deportivas al aire libre.