Variedad de rigor presidencial frente al toreo populista

En la plaza de toros de Zaragoza, y en Aragón en general, tenemos la particularidad de que el presidente puede decidir si se abre o no la puerta grande. Con una oreja cortada en cada turno, no basta para salir aupado a hombros. Aunque el público proteste hasta la saciedad por el triunfo de un torero, el palco posee potestad para negarlo. Esto no ocurre en Madrid ni en el resto de comunidades autónomas donde el reglamento así lo marca. Por eso debemos cuidar y favorecer la correcta administración de los triunfos. Todos sabíamos a lo que acudíamos ayer a la plaza. Nadie esperaba más del Fandi ni de quienes vinieron a jalearle. Otra cosa son las formas de frenar el populismo efervescente.

El presidente negó la oreja al diestro granadino en el primero de la tarde cuando los tendidos eran un clamor. Si Antonio Placer no vio mayoría de pañuelos –a mí me pareció claramente que la había–, de acuerdo. De lo contrario, estamos hablando de variedad de criterios.

Cuarenta y ocho horas después de admitir el apoyo local al pedrolense Imanol Sánchez, Placer fue injusto con Fandila. Conste que el granadino –como casi siempre– no me gustó en absoluto. Pero el que paga manda, y ayer debió marchar con un apéndice más en el esportón. El usía se hubiese evitado la bronca de inicio y, muy probablemente, tener que aguantar la doble petición en el cuarto. Ahí, como en la faena premiada de Alberto Álvarez el pasado lunes, sí aguantó como es debido. Chapó. Que protesten lo que quieran cuando la decisión es cosa tuya.

El resultado –que el triunfo no alcanzara la puerta grande– fue adecuado, pero la fórmula debió ser otra. Por cierto, López Simón cobró otra oreja barata y Ginés Marín, recién recuperado de una cornada en el rostro, anduvo más apático y despegado que de costumbre. El presidente de Aragón, Javier Lambán, presenció el transcurso de la tarde desde el palco de autoridades junto a su homólogo de la Diputación Provincial de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero, el consejero Vicente Guillén de Presidencia y el portavoz del grupo parlamentario socialista Javier Sada.

Serranito sustituye a Fortes

El diestro aragonés Paúl Abadía ‘Serranito’ será el sustituto de Saúl Jiménez Fortes en la corrida de toros de hoy, 11 de octubre. El zaragozano reaparecerá en su plaza con toros de Adolfo Martín y en compañía de Antonio Ferrera y Miguel Ángel Perera.

Precisamente, un toro del mismo hierro hirió a Serranito el pasado mes de agosto en Huesca. Recibió un puntazo en la zona de la ingle cuando toreaba al segundo de la tarde –herida de dos trayectorias de 20 y 10 centímetros– y, tras ser atendido en la enfermería, salió a torear al cuarto del festejo. Los doctores Enrique Crespo y José Ángel Velilla lo atendieron en Huesca, antes de que pasara a Zaragoza y fuese dado de alta en la clínica Montecanal. Una vez completada su recuperación, Serranito sustituye a su compañero Fortes, que causa baja por fracturarse el peroné en la Feria de Otoño de Madrid.

Además de a Serranito, la empresa de la plaza de toros de Zaragoza (Tauroejea y Circuitos Taurinos SL) ha tanteado a Álvaro Lorenzo, que el sábado salió por la puerta grande de La Misericordia al arrancar dos orejas a su primer oponente, y Pablo Aguado, que, en la misma corrida que Fortes cayó lesionado en Las Ventas, sumó un trofeo y dejó muy buenas sensaciones.

Con quien la empresa no ha contactado, a pesar de las informaciones vertidas en distintos medios, es con toreros como Emilio de Justo o Octavio Chacón, que ya lidió la corrida concurso de ganaderías.

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