Ejea se tiñe de azul y blanco en sus días grandes

145 niños recibieron ayer su primer pañuelo festivo, de color azul "ejeano" y con su nombre grabado, en el día de las prefiestas.

Teresa Olivan y Sergio González con su hijo Lorien y Nacho Pardos y Julia Ungría con su hijo Nacho
Ejea se tiñe de azul y blanco en sus días grandes
Ana García Cortés

Son los nueve días más esperados del año en la comarca de las Cinco Villas. Las fiestas patronales de la Virgen de la Oliva inundan Ejea de diversión y alegría. Aunque de forma oficial arranquen este sábado al mediodía, cada vez son más los ejeanos que adelantan su inicio. Este viernes se celebró el día conocido como prefiestas. Una jornada intensa por los preparativos de última hora, y también de comidas de empresa y amigos. Las calles y terrazas recogieron los primeros sonidos de jolgorio festivo.

Eso sí, el punto neurálgico de la fiesta estuvo en la plaza de la Villa. Es sin duda uno de los actos más esperados. Los niños nacidos durante este último año se enfundaron el traje ejeano. Un total de 145, nacidos durante el segundo semestre de 2017 y el primero de 2018, recibieron su primer pañuelo festivo. La imposición del pañuelo es uno de los actos más multitudinarios de las conocidas prefiestas. La alcaldesa de Ejea, Teresa Ladrero, y miembros de la corporación fueron colocando el tradicional pañuelo de fiestas color azul.

Es sin duda una insignia muy especial para las familias, donde aparece el nombre del pequeño y el escudo de la villa bordado. Durante más de una hora se escucharon numerosos nombres, pero sin duda los más repetidos fueron: Lucia, Julia, Marcos y Diego. El dato más curioso es que por el escenario pasaron dos parejas de gemelos y mellizos. Una vez más, el nombre de la patrona de la localidad, Oliva, no fue escogido por ninguna familia.

Una tarde de ilusión y nerviosismo tanto por parte de los bebés como de los familiares. Así se vivió en casa de los González-Oliván, una familia ejeana que subía al escenario por primera vez. Unos nervios compartidos también en casa de los Pardo- Ungría. Este año los protagonistas eran Lorién y Nacho. Durante los últimos días prepararon con cuidado este acto. Los colores ejeanos no faltaron en su conjunto, incluso el fajín y zapatillas a tono.

Las fiestas comienzan este sábado de manera oficial. Los pregoneros de este año son los dos equipos de la SD Ejea. Los primeros tras conseguir su merecido ascenso a segunda división B, y ellas por estar, durante los últimos 20 años, rompiendo barreras y estereotipos en el campo."Tras un año esperando este momento, ya están aquí las fiestas. Las actividades son para que todo el mundo disfrute" remarcó la alcaldesa.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión