Un pregón abarrotado y deportivo en Caspe

Con los vivas a Caspe y a San Roque que, ha proclamado el alcalde, Jesús Senante, desde el balcón del ayuntamiento y con el chupinazo y la tronada han dado comienzo las fiestas de la capital del Bajo Aragón-Caspe. En la plaza y en la calle Mayor cientos de personas han seguido este momento.

Por delante, cinco días de celebraciones con actos para todos los gustos y públicos, en los que tiene cabida la tradición, representada por los certámenes de jota, música, deporte, toros de fuego, carrozas y mucho más.

El balcón principal del consistorio estaba este sábado por la mañana muy concurrido, con las caspolinas mayores, infantiles, los caspolinos mayores, la corporación y una nutrida representación de CD Caspe. Este club de fútbol ha sido el pregonero. Es una de las agrupaciones más antiguas de Aragón, ya que cumple 95 años de historia, como ha recordado su presidente, Jorge Carreras. Él ponía voz en representación de los "muchos caspolinos, de gente comprometida con Caspe". Y ha aprovechado para recomendar a los presentes: "Vivid el fútbol y el deporte".

Y desde allí la fiesta se extendía por toda la calle Mayor, con los gigantes, cabezudos, las charangas y banda de música, que precedían a los vecinos y visitantes hasta la plaza Compromiso. Frente a la Colegiata bailaron los gigantes y desde allí, una vez más, hasta la plaza España para contemplar el segundo baile antes de volver al vestíbulo del consistorio, su casa durante las fiestas.

Ha habido poco tiempo para la comida, ya que había que ir junto a las peñas a colocar el cachirulo a San Roque, en la imagen que el santo tiene en la fachada de la ermita dedicada a él y que también da nombre al barrio. Cada año es una peña diferente quien lo coloca y lo hace siempre de una forma original. En este 2018 el honor ha recaído en la peña Sekta y el protagonismo lo tenían los niños.

Uno de los actos más multitudinarios ha sido la apertura de las peñas que integran Interpeñas, un recorrido que abarca buena parte de las calles del municipio y que acaba con un concierto de música DJ.

Son unas fiestas en las que la reivindicación también está presente. Tanto Interpeñas como el Ayuntamiento se han adherido a la campaña de ‘No es no’. Con el programa, se regala una pulsera con este lema. Por su parte, Interpeñas, con su ya tradicional vaso -que los peñistas portan todos los días- regala un pañuelo con el logo y este mismo mensaje contra las agresiones sexistas.