Las obras del centro cívico de Rosales del Canal comenzarán antes de que acabe este año

Las obras del centro cívico de Rosales del Canal, que está llamado a ser toda una referencia en el nuevo Distrito Sur, comenzarán antes de final de año. Este equipamiento ocupará parte del edificio que empezó a construir en este barrio Remar, y que el Ayuntamiento compró a esta entidad en 2015 después de una intensa polémica vecinal por su construcción.

El gobierno de ZEC confía en poder sacar a concurso estos trabajos en el plazo de un mes. El proceso de adjudicación a la constructora puede durar otros tres o cuatro meses más, por lo que espera que las obras puedan comenzar a finales de este año. Los trabajos, que tienen un presupuesto de 1,6 millones de euros, durarán unos ocho meses, por lo que las instalaciones estarán listas a lo largo de 2019.

El centro cívico ocupará una parte del edificio, mientras que la otra quedará reservada para un uso futuro aún por definir. Incluso no se descarta que pueda ser un centro de atención sanitaria, si se ve necesario y se llega a un acuerdo con el Gobierno de Aragón. Pero de momento, se va a actuar en el sótano y en la planta baja del enorme inmueble.

Será un edificio de usos flexibles y se podrá adaptar a distintas funciones. Tendrá un centro de tiempo libre (con una ludoteca, zona de mayores, patio exterior...), una biblioteca y un centro cívico. Dentro de esta misma zona, para una segunda fase quedaría la casa de la juventud, el ágora y la sala polivalente. Este último es un espacio amplio de 530 metros cuadrados con un aforo de unas 300 personas. Todos estos nuevos equipamientos irán en la zona sur del edificio. La norte, de momento, quedará en la reserva a la espera de que se decida qué se hace y se le dote económicamente.

Novedosa cubierta vegetal

En esta segunda zona se ha instalado una novedosa cubierta vegetal que ha costado 82.000 euros. Se trata de una iniciativa que se va a extender a otros equipamientos municipales, y que permite regular las temperaturas del interior del edificio, actuar como aislante y, además, mejorar la calidad del aire. En un edificio del Ayuntamiento (la antigua lonja de pescado del centro cívico Delicias) incluso se está planificando la instalación de un recubrimiento vegetal en sus fachadas. El concejal de Urbanismo, Pablo Muñoz, destacó el novedoso sistema que, en su opinión, puede contribuir a "luchar contra el cambio climático".