Teatro comunitario para celebrar el carnaval y el entierro de la sardina

Los grupos de teatro comunitario del Gancho y San José se sienten muy identificados con el carnaval. “Esta fiesta tiene un alto componente de lo que hacemos a diario. Nos gusta salir, poner en marcha la creatividad, celebrar tradiciones y juntarnos todos”, cuenta Sebastián Ramírez, uno de los coordinadores. Entre los dos barrios ya son 90 las personas (niños y adultos) que disfrutan en comunidad de las artes escénicas, un proyecto joven que en octubre brindará por su tercer aniversario.

A lo largo de estos años han programado diversas actividades, pero este sábado por primera vez darán juntos la bienvenida al carnaval. Será en el Centro Social Comunitario Luis Buñuel a partir de las 18.00, lugar que sirve habitualmente de punto de reunión para el grupo del Gancho, y los organizadores esperan que la iniciativa se torne en tradición con el paso del tiempo.

La fiesta empezará con el grupo de teatro comunitario de niños del Gancho. Se creó en octubre de 2017 y está compuesto por siete pequeños. Para la ocasión, han preparado una representación de 10-15 minutos que abordará una tradición aragonesa, fraguada principalmente en los Pirineos, que consiste en despertar al oso para que comience la primavera y dé paso al calor. La puesta en escena concluirá con una canción y además de los niños participarán en la actuación un músico y dos coordinadores del teatro.

Después, el grupo de danzas medievales La Carola realizará un taller en el que mostrará cómo es este tipo el baile e invitará a los asistentes a participar. Tal y como avanza Ramírez, también se han preparado unas mojigangas, “otra tradición aragonesa que consiste en adaptar a una canción popular sencilla llamada ‘El villano’ letras que hagan rimas de crítica social o política”. La intención es que los asistentes se animen a escribir sus letras para poder hacer tres o cuatro rondas de mojigangas a lo largo de la velada.

Durante toda la noche habrá sorteos, juegos, un ‘photocall’ y antifaces y pelucas para disfrazar a la gente que no acuda vestida desde casa. El grupo de teatro comunitario pondrá al servicio de todos los presentes sus trajes, atrezo y maquillajes. Además de los disfraces y el teatro, la música será la otra gran protagonista de la jornada. En primer lugar participará un trío de versiones de rumba y flamenco llamado Kantamelade, y la fiesta la cerrará el conjunto Cumbiazepam, de cumbia de mujeres, que actuará por primera vez en Zaragoza.

La entrada al CSC Luis Buñuel será libre, pero el que quiera podrá contribuir consumiendo en la barra que habilitarán o comprando las camisetas del teatro comunitario, que saldrán este sábado a la venta. “Las hemos hecho con una empresa que garantiza que no hay explotación laboral en ninguna parte del proceso”, matiza Ramírez. La barra también estará orientada a la economía social y solidaria, por ello tendrán “Fritz-Kola y no Coca-Cola, que es una bebida local y de cercanía, o zumos ecológicos”, explica el organizador.

La fiesta se va a celebrar en medio justo después de despejarse el futuro del Luis Buñuel. El Gobierno de Zaragoza aprobó este viernes la regularización de los usos del antiguo instituto, que seguirá dedicándose a actividades socioculturales y que albergará en la primera planta la Oficina de Planes Integrales.

Entre los colectivos vecinales que llevan cuatro años realizando en el Luis Buñuel actividades comunitarias existía inquietud debido a una multa impuesta por la Policía Local por su uso ‘alegal’. Según explicaba Ramírez antes de conocer la noticia, "estamos muy contentos con el apoyo recibido”. Añadió que hay muy buena recepción entre los vecinos y colectivos: "nos han mandado apoyo hasta de Latinoamérica”.

Este es solo el inicio del carnaval. El cierre se echará el próximo miércoles 14 con el entierro de la sardina en la Harinera de San José. Todo el que quiera participar deberá acudir de negro para llorar a la sardina como las tradicionales plañideras. El acto estará encabezado por el grupo de teatro comunitario allí residente, pero también participará la Escuela de Artes de Zaragoza y el proyecto de la Harinera Ensonación, que se encargará de poner el toque musical.