La Guardia Civil investiga un incendio en una cueva de Épila

Un vecino ha tenido que dejar su casa-cueva porque está justo debajo de la siniestrada y se inundó tras las labores de extinción.

El fuego se inició a última hora del jueves.
El fuego se inició a última hora del jueves.

La Guardia Civil está investigando las causas de un incendio que en la madrugada de este viernes arrasó una cueva de la localidad zaragozana de Épila. Según informaron desde la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ), el fuego comenzó a última hora del jueves y los bomberos de la institución provincial tardaron casi cinco horas en sofocar las llamas que arrasaron la propiedad, situada en el paraje conocido como Cabezo Manolín.

El alcalde de Épila, Jesús Bazán, explicó a este periódico que sobre las 23.45 del jueves recibió el aviso del incendio y se desplazó hasta el lugar. Las llamas habían comenzado en una especie de porche situado a la entrada de la cueva, que no es una vivienda como tal pero sus dueños sí que la suelen utilizar como almacén. Precisamente las cosas guardadas en el inmueble, entre las que se contaban grandes cantidades de documentos y enseres antiguos de madera (como una prensa de vino), habrían incidido en la rápida propagación de las llamas.

Los bomberos de la DPZ terminaron su labor casi a las 5.00. Durante la extinción fue necesario desalojar la cueva más cercana a la siniestrada, ya que se trata de un inmueble en el que viven personas a diario. Además de la vivienda en la que se originó el fuego también resultó dañada una propiedad que está situada justamente debajo de la afectada. Según refirió Jesús Bazán, el agua utilizada para sofocar las llamas se filtró e inundó varias estancias de esta cueva en la que reside un hombre que tuvo que abandonar el inmueble. "Estamos buscando una solución para este vecino que, en principio, tendrá que estar unos tres días fuera de su casa", abundó Bazán.

Recogida de pruebas

La Policía Judicial se desplazó este viernes por la mañana hasta el lugar de los hechos para recabar pruebas que pudieran ayudar en el esclarecimiento de los hechos. El alcalde de Épila hizo un llamamiento a la prudencia tras este incendio y señaló que hay que esperar a que culmine la investigación abierta para determinar por qué se desataron las llamas. "Después, ya se verá qué medidas se toman y quién las tiene que tomar", zanjó el primer edil de la localidad.

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