Movera no podrá utilizar su pabellón durante las fiestas

El recinto tampoco acogerá otras actividades durante el resto del año por problemas con el plan de autoprotección.

El pabellón de Movera está situado en el número 28 de la calle del Padre Claret.
Movera no podrá utilizar su pabellón durante las fiestas
Toni Galán

Los vecinos de Movera no podrán utilizar estas fiestas su pabellón. Tendrán que conformarse con una carpa que se instalará entre el día 7 y el 10 en el recreo del colegio Maestro Don Pedro Orós. Tampoco podrán organizar actividades extraescolares o clases de gimnasia hasta nuevo aviso. El problema está en que el recinto no se ajusta al nuevo decreto de espectáculos.

Esperanza Calvano, alcaldesa del barrio rural, lleva meses solicitando al Ayuntamiento de Zaragoza el plan de autoprotección, documento clave para aclarar qué falla. "Al principio me dijeron que todo estaba en orden, pero el 23 de agosto me comunicaron que el pabellón tendrá que permanecer cerrado", explicó.

Aunque sospecha que hacen falta "más salidas de emergencia" (hay once, pero repartidas en dos laterales), Calvano no podrá mover ficha hasta saberlo con certeza. "Si ese fuera el problema se podría solucionar pero, por más que hemos pedido el informe, aún no sabemos cuáles son las deficiencias", manifestó.

A su parecer, el Consistorio "ha dejado vendidos" a los vecinos, ya que "ha habido tiempo suficiente" para subsanar los fallos. "Movera no tiene centro cívico. Sin el pabellón, el barrio se bloquea", aseveró. Calvano ya ha informado al respecto a las asociaciones vinculadas a las fiestas y, en el momento en que se confirme que el pabellón tampoco podrá utilizarse el resto del año, reunirá a las asociaciones de padres y madres y al resto de colectivos afectados.

No poder usarlo "trastoca todos los planes", ya que en él estaban previstas orquestas, discomóviles, un certamen de jota, un espectáculo de magia y una revista, entre otras actividades. La alcaldesa no descarta que haya que cancelar varios actos, ya que la carpa tendrá que desmontarse el domingo por la tarde para no interferir con la vuelta al cole. A esto hay que sumar que este año Movera tendrá que alquilar un escenario (el Ayuntamiento no podía proporcionarles uno, según la alcaldesa) y aún no tienen los permisos necesarios.

Los vecinos, según explicó, están "contentos" dentro de lo que cabe, ya que, al menos, hay una alternativa. No obstante, Calvano admitió estar "preocupada" por el futuro del pabellón. "Tengo intención de ir al Ayuntamiento a principios de semana. Me urge encontrar una solución", explicó.

Más adelante también habrá que estudiar si es necesario instalar tornos para regular el aforo. Sin embargo, la prioridad es el plan de autoprotección. Se da la circunstancia de que el pabellón de Movera estuvo en obras en 2015. "Se hicieron para que no hubiera problemas, pero parece ser que aún no está en condiciones", lamentó.

Este verano, otros barrios rurales como Juslibol también tuvieron que instalar carpas al recibir una notificación que les avisaba de que no podían usar su pabellón.

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