Pasos de peatones “hechos polvo” en La Romareda

Su aspiración: “Que se arreglen los pasos de peatones del Polígono Romareda, pues están hechos polvo, llenos de socavones y el asfalto da pena en ellos”. Con tal contundencia opinan en la asociación vecinal Agustina de Aragón sobre una situación que, según valoran, “no puede permitirse” en estos puntos viales y que “se da desde hace varios años”. Por ello, “estamos pidiendo al Ayuntamiento de Zaragoza que se actúe y denunciándolo constantemente”, comenta Pablo Sánchez en representación del colectivo.

El estado de algunos de los pasos de cebra, dicen, “es preocupante”. “Están mal y no se deberían tener así”, apostillan desde el ente al tiempo que aseguran que reciben quejas sobre el tema, habiendo personas que se han llegado a caer y “sabemos que lo han denunciado”.

A su juicio, todas las zonas de cruce peatonal en el barrio “poseen deficiencias”, si bien, “unas más que otras”. Como ejemplo de las que peor imagen presentan señalan las situadas en calles como Condes de Aragón, “subiendo desde Violante de Hungría y hacia la derecha, en los cruces con avenidas como Juan Carlos I y Juan Pablo II”; o en el entorno de Asín y Palacios con Pedro IV el Ceremonioso. “Se observa que hay partes que se han parcheado, pero en otras sigue habiendo agujeros bastante grandes y bultos”, detalla Sánchez.

Cuando lo creen necesario, explican desde la asociación vecinal, demandan a través de la junta de distrito que se actúe en puntos concretos del entramado urbano. Entonces, “vienen y tapan el bache con asfalto, pero este se vuelve a levantar a los quince días por el tráfico”. Fuentes vecinales argumentan que esa no es “la solución más adecuada”: “Son parches que sirven durante unos días o meses, pero al final tenemos el mismo problema”. Su demanda pasa así porque se levante y frese el suelo, se sustituya el firme y se vuelvan a pintar las marcas viales.

En un barrio “que se ha hecho mayor y que posee dos residencias”, mantener estos puntos lo consideran fundamental para evitar sustos entre “personas que acuden al centro de salud, vecinos más mayores que pueden tropezar o quienes utilizan sillas de ruedas”, ahonda Pablo Sánchez, presidente de la AVV.

En septiembre, aseguran en el colectivo, volverán a la carga “si no se actúa durante el verano”. Y mientras, recuerdan igualmente la problemática de las baldosas levantadas o sueltas, por la que también batallan puntualmente en esta zona de la ciudad. Sin embargo, “suelen arreglarlas rápidamente, más que las calzadas”, matizan.