El edificio de 20 plantas de la plaza de Europa se hará en cinco fases tras recibir hoy sus permisos

Tras una larga tramitación en el Ayuntamiento, la enorme manzana de pisos que se va a levantar en la plaza de Europa tendrá –previsiblemente– esta mañana los permisos necesarios para que empiecen los trabajos de construcción. Si no hay sorpresas y los partidos mantienen los votos que han emitido en trámites anteriores, la Gerencia de Urbanismo aprobará esta mañana la concesión de la licencia necesaria para que Ebrosa levante un edificio de 216 viviendas, otros tantos trasteros y 300 plazas de aparcamiento. Los bloques se construirán en cinco fases, la primera de las cuales arrancará antes del verano, según fuentes cercanas a la empresa.

El proyecto cubre el espacio de una parcela de 3.921 metros cuadrados que queda encerrada entre la plaza de Europa, el puente de La Almozara y la calle del Guadiana, y que actualmente se emplea, en parte, como aparcamiento provisional. Se trata de un solar de geometría irregular que ha ido acumulando los derechos urbanísticos que tenían varias parcelas cercanas que también estaban pensadas para construir pisos, pero que fueron ganadas como espacio público de ribera.

El estudio de detalle que se aprobó originariamente en 2007 dibujaba una manzana cerrada y hermética, formada por una línea constante de 14 alturas, salvo el lateral de la calle del Guadiana, donde se llegaba a diez. Sin embargo, el rediseño elaborado por Clúa-Longás CLC Arquitectos y Patxi Mangado planteó cambiar la distribución de los volúmenes, sin aumentar la edificabilidad.

Un perfil escalonado

Con estos cambios, la manzana tendrá un dibujo escalonado. Contará con un lado de solo tres plantas que hará que quede prácticamente abierta a la plaza de Europa –lo que favorece la entrada de sol en la plaza interior y la ventilación–. El resto del conjunto tendrá diferentes alturas, de 7, 10, 14 y hasta 20 pisos (19 más la planta baja) en el lado que da al río Ebro. En total habrá 216 viviendas, a pesar de que el plan permitía elevar la cifra por encima de las 300. Este edificio –o, al menos, uno de sus lados– será uno de los más altos de la ciudad, aunque muy cerca, en la plaza de Santo Domingo, hay otro que tiene 19 plantas.

En pocos días se abrirá un concurso para que una empresa acometa los trabajos de la primera fase, cuyas obras comenzarán en los próximos meses. Este primer volumen de los trabajos tendrá un edificio de 37 pisos, pero incluye también la construcción de las tres plantas de aparcamiento subterráneo reservadas para todo el proyecto, así como las plantas bajas de toda la manzana. El bloque tendrá hasta 13 alturas, con una superficie total construida de 5.573 metros cuadrados.

Estará ubicado en el lado del solar que da a la calle del Guadiana, en su entronque con la avenida de La Almozara. La segunda fase y la tercera, de 34 y 24 viviendas, respectivamente, están previstas en la misma calle del Guadiana. La cuarta fase (46 pisos) se levantará en el borde de la parcela más cercana a la plaza de Europa, mientras que la quinta (75), la más alta de todo el conjunto, se hará en la parte más cercana al río Ebro.

Según apuntaron ayer fuentes cercanas a la empresa promotora, no hay una planificación exacta de cuándo se irán afrontando las fases, ya que dependerá de la demanda que encuentren en el mercado. Si este responde de forma positiva, incluso se podría simultanear la construcción de diferentes fases. De momento, Ebrosa ya ha elaborado una lista de posibles interesados, y una vez tenga todos los permisos aprobados, iniciará la comercialización.

Los pisos se podrán levantar al mismo tiempo que se acometen los trabajos de urbanización. Para garantizar esta circunstancia, los promotores han depositado una fianza de 593.540 euros, la mitad de lo que supone el coste estimado de las dos fases de urbanización y de la electrificación.

Un largo trámite

El expediente que previsiblemente se aprobará hoy en Urbanismo culmina una trayectoria que se ha prolongado de forma casi interminable, desde que se aprobara el último estudio de detalle hace casi dos años.

El gobierno ha solicitado informes de Patrimonio –a pesar de que el edificio no está en el Casco Histórico–, de la Confederación Hidrográfica del Ebro –ha habido otros proyectos junto al río que no lo han precisado– y ha exigido que se tramitaran de manera conjunta la aprobación de la licencia de urbanización y el de la caseta de información comercial que se va a instalar, algo que tampoco es habitual. Además, se han resuelto las once alegaciones presentadas por la asociación Ecologistas en Acción.