Fuentes de Ebro, el corazón de las mujeres taxistas

La localidad zaragozana se convirtió ayer en la
anfitriona de una concentración nacional que se celebra desde hace cinco años y que reunió a 100 profesionales del taxi.

La localidad zaragozana se convirtió ayer en la anfitriona de una concentración nacional que se celebra desde hace cinco años y que reunió a 100 profesionales del taxi.
Fuentes de Ebro, el corazón de las mujeres taxistas
Aránzazu Navarro

Este año tocó Fuentes de Ebro. La localidad zaragozana fue la encargada de hacer los honores y acoger la concentración de mujeres taxistas de toda España que pasaron un fin de semana festivo en la población aragonesa.

En esta quinta edición participaron alrededor de un centenar de mujeres, que llegaron desde las islas Canarias, Cataluña, Andalucía, Comunidad de Valencia, País Vasco, Asturias, Madrid y Castilla y León.


La anfitriona fue Sonia Rubio, taxista de Fuentes de Ebro, que se empleó a fondo para que la jornada de ayer fuera inolvidable. El acto más importante del día fue el homenaje que se le brindó a Isabel Sánchez, la primera mujer taxista que hubo en Zaragoza. Esta sorpresa, ideada por la delegación maña, resultó muy emotiva porque la homenajeada (que ahora tiene 77 años) acudió a la cita encantada e ilusionada de haber sido la pionera (empezó a conducir taxis en 1975).


Al acto, además de representantes municipales, acudieron responsables de la cooperativa y la asociación de autotaxis de Zaragoza. Hubo también una actuación del grupo municipal de jota de la localidad y un recibimiento con tambores.


Por su parte, las taxistas llegadas de Cataluña (que fue uno de los grupos más numerosos, con una treintena de participantes) quisieron poner también su granito de arena en la organización festiva e idearon una ‘flashmob’ (una acción organizada, colectiva, que se realiza en un lugar público y durante un breve espacio de tiempo) que consistió en bailar en la plaza del Ayuntamiento, explicó Miriam Martínez, taxista catalana. Previamente, todas las participantes, que habían salido de sus alojamientos vestidas con una camiseta en la que se leía ‘Soy mujer y taxista. No le temo a nada’, enfilaron hacia la plaza del Ayuntamiento a ritmo de samba.


La organización de estas concentraciones, que comenzaron hace cinco años en Oviedo, tiene como único objetivo pasarlo bien y disfrutar de un fin de semana con colegas y amigas. No se trata de una agrupación reivindicativa, sino festiva: "La idea es desconectar del día a día y olvidarte del trabajo", explica Miriam Martínez.


Lo que está claro es que la iniciativa tendrá continuidad. Sonia Rubio recuerda que la primera quedada se organizó casi por casualidad: "Se hizo en torno a un grupo de mujeres taxistas de Oviedo y Gijón que tenían un chat en Whatsapp y quedaban todos los años para cenar. En 2013, otras taxistas de España, que participábamos en el Whatsapp, –apunta– decidimos ir a la cena. La idea gustó y ya se ha quedado establecida como una fiesta anual en la que cada vez participan más mujeres".

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión