En una época en la que la construcción de nuevas viviendas mira más hacia el interior de la ciudad que hacia el extrarradio, el entorno de la avenida Cesáreo Alierta se ha convertido en uno de los máximos exponentes del proceso de ‘rellenado’ de solares vacíos en la ciudad consolidada. En los dos últimos años, en esta avenida y en las calles cercanas se han levantado (o se ha dado permiso para hacerlo) al menos 700 pisos, según las licencias que han ido pasando por la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento.

La mayoría se han acumulado en la zona final de Cesáreo Alierta, la que más ‘calvas’ presentaba, y en la zona en la que el trazado de esta avenida se arrima a la calle Miguel Servet, poco antes de llegar al Tercer Cinturón. Se trata de una zona entre San José y Miguel Servet en la que la promoción ‘estrella’ la han conformado las 354 viviendas de protección oficial proyectadas frente al Príncipe Felipe, que ya están vendidas y cuyas tres fases están en diferente estado de ejecución.

Se trata de una promoción que ha permitido cerrar urbanísticamente la avenida, que ahora recibe a los vehículos procedentes de la carretera de Castellón con otro aspecto. Fernando Montón, gerente de Plaza 14 –que promueve la obra junto con el Grupo MLN–, cree que con esta construcción "la avenida gana en atractivo", y que en su conjunto se trata de una zona que "se ha dinamizado bastante".

En este caso, se trata de un área nueva, creada y urbanizada para construir esas 354 viviendas. Sin embargo, un poco más adelante, en plena avenida Cesáreo Alierta, hay dos casos significativos de solares que estaban vacíos en plena trama urbana de San José y que en los últimos meses se han activado. A la altura del número 100 (la entrada realmente es en la calle Mayores de Aragón) se inauguró recientemente el edificio Ábaco, con 51 viviendas. Y a apenas 30 metros, a la altura del número 88, se está empezando a levantar el edificio Exel, con otros 36 pisos.

El final de la calle Miguel Servet también parece haberse reactivado. A las dos promociones de la calle de Joaquín Guiral siguió la construcción, hace ahora dos años, de 68 pisos a la altura del número 143. En el entorno de la antigua fábrica Schindler –abandonada desde hace una década– también ha habido actividad, con la construcción de un edificio de 24 viviendas en la calle Padre Chaminade, y la reciente licencia para levantar otras 90 entre las calles de Yolanda de Bar y Vicente Cazcarra Cremallé.

Al otro lado de Cesáreo Alierta, en el barrio de San José, también ha habido movimiento en los últimos meses. Cerca de Tenor Fleta, en la calle de Ventura Rodríguez, se tramitó el permiso de construcción de un bloque de 16 pisos, mientras que en Puente Virrey se ha rellenado el solar vacío a la altura de la calle de Miguel Ángel Tricas con un edificio para 56 viviendas. Ya cerca de Torrero, recientemente también se tramitó una licencia para construir 24 viviendas en un solar entre las calle de Tetúan y de Santa Gema.