Antonio Chueca empezó a trabajar este lunes en su nuevo empleo y si todo va bien, pronto se convertirá en una de las caras más reconocibles del barrio del Actur. O bueno, del código postal 50018.

Antonio tiene 26 años y una discapacidad intelectual del 36%. Hasta hace unos meses ejercía como agricultor ecológico en Gardeniers, el centro especial de empleo de Atades. Sin embargo, debido a los problemas físicos que arrastra como consecuencia de una operación de corazón, tareas como cargar con grandes pesos y faenar en el campo cuando hace demasiado calor, le resultaban demasiado arduas.

Por eso, Antonio ha sido reubicado y ha tenido el honor de convertirse en el primer Koiki de Zaragoza. Desde este lunes, el joven recorre a pie, en bici o en tranvía el barrio zaragozano del Actur para llevar a sus vecinos, en el momento del día que más les convenga, los paquetes que tenían previsto recibir en sus casas.

¿Qué es Koiki?

Koiki es un proyecto a nivel nacional que se define como un servicio de eco mensajería sostenible de proximidad. Tiene además entre sus principales objetivos la inserción laboral de personas en riesgo de exclusión social o con algún tipo de discapacidad. Empezó a operar como empresa social en algunas ciudades a finales del 2015 y en este tiempo ha logrado cerrar varios convenios de colaboración con grandes empresas de distribución. Por eso, Atades decidió ponerse en contacto con ellos y traer la iniciativa a Zaragoza.

Este lunes se estrenó el servicio en la ciudad y Antonio, el único koiki que tenemos por ahora, ya tuvo que repartir siete paquetes. Zeleris, la filial de Telefónica dedicada a la distribución, es la primera empresa que se ha lanzado a colaborar con Koiki en Zaragoza y cada mañana deja en el centro especial de empleo que tiene Atades en el Actur todos los paquetes destinados al código postal 50018. De esta manera, Zeleris se ahorra invertir la mañana en repartirlos casa por casa y deja esa tarea en manos de Antonio. Además, Antonio lo hace a pie o utilizando medios de transporte sostenibles, por lo que se evitan emisiones de CO2.

En Zaragoza

Félix Arrizabalaga, gerente de Atades, expone la razón de ser de este proyecto: "El incremento del comercio electrónico ha provocado que las empresas de distribución se saturen a la hora de repartir a domicilio en las ciudades. Van con la furgoneta, tienen que aparcar en doble fila, a veces se encuentran con que no hay nadie en casa...". Con el sistema de Koiki, esas empresas dejan todos los paquetes de un barrio en un único punto. En este caso, el centro de Atades.

Allí, Beatriz Frontiñán, la trabajadora social encargada de coordinar el proyecto en Zaragoza, ayuda a Antonio a llamar uno por uno a los destinatarios para preguntarles a qué hora les viene bien recibir el paquete en sus casas. Después, diseña la ruta que tendrá que seguir el koiki esa mañana y Antonio se lanza al reparto vestido con un uniforme verde y gris.

El desembarco de Koiki en Zaragoza ya ha permitido dar trabajo a Antonio. Atades espera crear otros cinco puestos de trabajo adaptado en los próximos cinco años gracias a esta iniciativa y llegar a tener un total de seis koikis distribuidos por la ciudad. Si se cumplen las previsiones, el segundo koiki de Zaragoza podría empezar a operar en otro barrio en marzo de 2017, y el tercero en septiembre.