Los artistas abren las puertas del lugar donde germinan sus obras

Esta vez, los papeles cambian. No son los artistas los que van a salir a la calle ni a llevar sus obras a salas de exposición, museos o galerías. Es la ciudad la que va a poder adentrarse en los lugares donde brotan sus ideas, donde cobran forma y germinan sus obras. Será durante cuatro jornadas en el mes de noviembre –del 3 al 6- cuando un total de 25 creadores de diferentes disciplinas abran las puertas de sus estudios a los ciudadanos, así como a profesionales del arte y coleccionistas para acercarse, no tanto al producto, sino al proceso y su labor.

La iniciativa, que además de esas puertas abiertas también presenta rutas guiadas, talleres formativos y una exposición, responde al nombre de Opendoor Zgz y tiene un objetivo claro: entender mejor lo que significa actualmente ser artista e intentar vivir del arte. La finalidad del proyecto pasa por “dar visibilidad a los procesos creativos de aquellos que trabajan en nuestra ciudad, sus medios y sus espacios, normalmente ocultos, para así poner en valor un sector que actualmente tan solo es perceptible en su última fase, que es la de exhibición y venta de la obra finalizada”, cuentan Elena del Diego y Carlota Santabárbara, gestoras culturales zaragozanas que han apostado por realizar aquí -con la colaboración de la Sociedad Municipal Zaragoza Cultural- una actividad habitual en otros lugares del país y el extranjero.

Su idea surgió la pasada primavera en una conversación que desencadenó las primeras pinceladas de un plan que ahora ponen en marcha con ilusión y compromiso en su ciudad. “Existen ya proyectos de esta naturaleza en otros sitios de España, como ‘Open Studio’ de Madrid o ‘Tallers Oberts’ de Barcelona, y que han sentado las bases de un fenómeno internacional que se desarrolla con éxito desde hace años en ciudades europeas y estadounidenses como Londres o Nueva York”, relatan.

Ambas reconocen que han aplicado una idea que ya existía y que trata de favorecer el acceso del público general y especializado a esos talleres, pero su planteamiento responde a la ausencia de iniciativas que acercasen el trabajo de estos profesionales en su primera fase de diseño y producción. “Entendemos que creando puentes de conocimiento directo entre los artistas y el público se genera una conciencia y un contexto cultural real en la ciudad, lo que también redunda en la capacidad de innovación de esta”, explican, al tiempo que apuntan que aunque el sector artístico está cada vez más presente en Zaragoza, la visibilidad de los creadores entre los propios ciudadanos es todavía escasa.

“Queremos mostrar cuáles son los tempos de sus obras, desde la idea que les invade frente a un café recién hecho o esperando el autobús, hasta su plasmación en aquello que nos dejan contemplar como espectadores”, señala Carlota Santabárbara. Igualmente, los rostros de los artistas son también parte de esa realidad que quieren dar a conocer las impulsoras de Opendoor Zgz. Elena del Diego subraya la situación de muchos de ellos, “que han de dedicar horas y esfuerzo a otras actividades profesionales que les permitan seguir desarrollando su carrera artística”, y recuerda el nombre de Esther Ferrer, representante del arte de acción en España y Premio Velázquez de las Artes Plásticas en 2014: “Hace unos días escuché que hasta los 63 años ella no había conseguido vivir de su obra, teniendo que realizar trabajos de todo tipo, y esto es algo muy grave que normalmente pasa desapercibido para el gran público”.Un total de 25 estudios

El pasado mes de septiembre se cerró la convocatoria para participar en la iniciativa y, en total, serán 25 los artistas de edades y trayectorias muy variadas que lo hagan abriendo sus centros creativos. Pintura, videoarte, escultura, grabado, arte electrónico, dibujo, instalación, fotografía, arte conceptual, sonido y ‘new media’ son las disciplinas aceptadas. “Aunque faltan unos cuantos nombres, estamos contentas con la acogida y, además, nos hemos encontrado más artistas de los que conocíamos”, indica Carlota.

Rubén Blanco y Néstor Lizalde son dos de ellos. Blanco, artista dedicado a la pintura y el videoarte, reconoce que este es un proyecto muy interesante en lo relativo a la faceta profesional del artista: “Parece que este trabajo va ligado a una escasa difusión y al no tener ingresos. Hace falta visibilidad para que comience a haber un movimiento que genere un mercado y una mayor presencia de los artistas aragoneses. Por eso me gustó tanto la idea”, manifiesta. Además, el profesional aragonés añade que la posibilidad de poder comentarle al público cuál es su proceso creativo, qué técnicas utiliza y cómo, enriquece al igual que las obras terminadas.

Mientras, Lizalde, que centra su trabajo en el arte a través de las nuevas tecnologías, valora la propuesta de Opendoor Zgz como una vía para comunicar la materia cultural que existe en la ciudad, así como destaca lo peculiar de su estudio, otro de los que se podrá visitar durante las jornadas. “Todo el mundo imagina cómo es un taller de escultura o de pintura pero en este caso es diferente, pues utilizo software o herramientas como las impresoras 3D en determinados procesos abiertos que también tienen un interés contemporáneo”, resume.“Están entre nosotros, en barrios de toda la vida”

En ese proceso de ‘descubrir’ a los artistas de la ciudad y su labor, estas gestoras culturales quieren incidir también en la “idea de que están entre nosotros, en barrios de toda la vida como Torrero o El Gancho”. Por ello, una de sus pretensiones pasa por conseguir que los ciudadanos vean “con una mirada renovada su propio barrio, valorándolo y descubriendo en él espacios de creación que seguramente les eran desconocidos hasta la fecha”.

Una forma de lograrlo será a través de las rutas guiadas, gratuitas, que se llevarán a cabo durante los diferentes días y que se diseñarán dependiendo del lugar donde se ubican los más de una veintena de estudios. Sobre las jornadas de puertas abiertas, la plataforma publicará próximamente los horarios de apertura de todos los puntos para que los ciudadanos puedan visitarlos libremente.

Una exposición en La Harinera de Zaragoza, que mostrará desde el 4 de noviembre objetos relacionados con los momentos de creación de dichos profesionales, completa el programa de Opendoor Zgz. “Con esta exhibición se pretende crear un marco de reflexión y análisis sobre los procesos de producción en el trabajo artístico. No se trata de una exposición temática al uso, sino de visibilizar el desarrollo de la investigación conceptual de los artistas, planteando la producción como un tiempo del trabajo creativo”, apuntan desde la organización. Además, la iniciativa contempla la realización de varios talleres formativos de grabado, acuarela o arte electrónico, entre otros, impartidos por los propios participantes y dirigidos a diferentes públicos.