Dice que todavía no se acostumbra a que la gente le reconozca por la calle, aunque en sus viajes en metro por Madrid de camino a casa es fácil que algún grupo de adolescentes griten: “Mira, ByViruzz”. El zaragozano Víctor Mélida se esconde detrás de ese seudónimo, y se ha convertido en poco más de un año en una de las caras más conocidas para los amantes de Youtube, donde atesora 1,400,000 suscriptores, gracias a los vídeos que sube a esta plataforma. Algo difícil de entender para aquellos nacidos en los años 80 y anteriores, pero que se ha convertido en su forma de vida. Así, miles de niños y adolescentes de entre 8 y 16 años se mantienen expectantes por ver cuándo Víctor actualiza su canal, habiendo llegado a superar el millón de visualizaciones de algunos de sus vídeos.

Todo empezó como una afición en un chico de Zaragoza, interesado en el diseño gráfico y que jugaba como extremo en el BM Huesca de Asobal. Poco más de un año y medio después, vive en Madrid, y se ha convertido en una de las caras visibles del canal español de PlayStation en Youtube, que compagina con su propia cuenta, la que le dio a conocer, y a la que saca un gran rendimiento a través de la remuneración por visitas y las colaboraciones con empresas. Porque ha descubierto que de internet sí se puede vivir, aunque dice que en su casa todavía les cueste creerlo. “Mi madre se divierte mucho cuando vamos por la calle y me paran para pedirme fotos”, comenta Mélida.

A su familia y hasta a él mismo le supone esfuerzo hacerse a la idea de su éxito. “Estoy cumpliendo un sueño”, asegura el youtuber, que acaba de llegar de la feria de videojuegos E3 en Los Ángeles, a la que acudió acreditado por Playstation. “Vamos como prensa, para poder reflejar lo que vimos en nuestro canal”. También debutó en un escenario formando parte del espectáculo YouPlanet con otros Youtubers, una experiencia que dice le gustó y que plantea repetir, en modo gira, en una fórmula que está triunfando en todo el país, y que incluso le podría llevar hasta Argentina.

En este tiempo también ha escrito un libro, basado en el mundo del Clash of Clans -uno de los juego de estrategia que comenta en sus vídeos, y que a pesar de que salió a principios del mes de mayo, suma ya su tercera edición. “Estuvimos firmando durante la feria del libro, y fueron como unos 200 ejemplares, uno de los que más gente atrajo. Son cosas que no te imaginas”, añade el youtuber.

“Mi primer propósito era llegar a los 100,000 suscriptores, pero al final he superado todas las expectativas, y espero llegar a los 2,000,000 antes de que acabe el año”, añade. Fue entonces, al llegar a los 100,000, cuando mostró su identidad, ya que hasta ese momento se escondía detrás de una máscara de Anonymous. A partir de allí, convertido ya en Víctor Mélida, su fama empezó a dispararse. Como muestra, los casi 96.000 seguidores con los que cuenta en Instagram y los 250,000 de Twitter, en una fama que se extiende hasta Lationamérica. “Entre un 30% y un 40% de mis seguidores proceden de países sudamericanos, y la verdad es que es un público muy fiel, que viven muy intensamente cada comentario que les contestas o referencia a ellos que haces”.

Respecto a su futuro, dice no preocuparle el hecho de que esta fama igual que llegó se pueda ir. “El público se renovará, y viendo la experiencia en otros países, como Estados Unidos, donde el fenómeno Youtube está mucho más extendido, creo que todavía nos queda mucho recorrido”, asegura, aunque tiene como propósito incrementar el número de vídeos. “Mi objetivo es organizarme para poder hacer uno al día a partir de este verano”, explica, y es que la edición de cada una de sus publicaciones le supone nueve horas de trabajo. Toda una jornada laboral, y que ante la gran cantidad de compromisos que ha adquirido le impide llevar un mayor ritmo de actualizaciones, algo que le reclaman sus seguidores a través de sus comentarios.

Su otra gran pasión, el balonmano, ha quedado en un segundo plano, algo que agradece su rodilla, maltrecha desde su época como jugador. “Había comenzado a jugar en el BM Aragón después de dos años en el BM Huesca cuando me llegó la oferta de Playstation, y tuve que decidirme”. No obstante, sigue calzándose las deportivas con el Maravillas La Salle, equipo de segunda, que ha conseguido el ascenso en varias ocasiones pero no ha materializado. Perfecto para evadirse tras horas delante de la plantilla.