La detenida por el incendio de la residencia de Santa Fe sigue en prisión un año después

Pasadas las once de la noche del 11 de julio de 2015, cuando la mayoría de los ancianos alojados en la residencia de Santa Fe ya descansaban, Carmen A. S., de 62 años, que hasta ese momento había estado viendo la tele con otra residente y una trabajadora en la planta baja del centro, se dirigió al primer piso, se hizo con un mechero y prendió fuego al colchón de una de las habitaciones que estaba vacía. Acto seguido y con voz tranquila, llamó a la cuidadora por su nombre y le dijo: "Sara, hay fuego".

Cuando la trabajadora subió al cuarto, las llamas llegaban ya hasta el techo. A pesar de que llegó a coger hasta dos extintores y vació uno por completo, la virulencia del fuego era tal, que no sirvió de nada. El humo comenzó a extenderse por todas las dependencias y la cuidadora optó por ir a la planta baja, en la que se alojaban los ancianos que precisaban asistencia para moverse, y los sacó poco a poco. En total, fueron once los evacuados, la mayoría octogenarios y el más mayor de 99 años. Mientras esto ocurría, Carmen A. S. presenciaba la escena desde el jardín sentada en una mecedora. Incluso llegó a advertir con calma a la trabajadora:"No entres más veces que se te va a caer el techo encima".

Los primeros en acudir a socorrer a los ancianos y a ayudar a la empleada a evacuarlos fueron tres vecinos, los cuales la encontraron completamente alterada diciendo que la responsable había sido Carmen A. S. De hecho, su hijo fue a la primera persona que llamaron desde el centro para decirle: "Tienes que venir, tu madre ha quemado la residencia". Luego llegarían dos policías locales de Cuarte de Huerva y miembros de Protección Civil, que lograrían sacar a más personas. A todos ellos se les unieron después Bomberos, Guardia Civil, sanitarios y un gran despliegue de medios que, tras asistir a los afectados y sofocar el incendio, no pudieron más que constatar que ocho personas habían muerto en sus habitaciones de la planta superior.Intoxicados por monóxido

Todos, según confirmarían luego los médicos forenses, perecieron intoxicados por monóxido de carbono. Dos meses más tarde, moría otro interno, de 71 años, tras haber permanecido dos meses en la uci del Clínico. En total, nueve víctimas mortales y once tuvieron que ser atendidas por las asistencias sanitarias aunque recibieron el alta pocas horas después. De estas once, cinco ya han fallecido este año por causas, en principio, ajenas al incendio.

Por esta acción homicida permanece en prisión preventiva Carmen A. S., quien ya estuvo en la cárcel de Zuera entre 2013 y 2014 por acuchillar a su marido. A raíz de esta agresión, su familia la incapacitó civilmente. Los médicos forenses del Instituto de Medicina Legal de Aragón determinaron que, pese a ese estado legal, la mujer, que lleva 32 años en tratamiento psiquiátrico, no tiene anulada ni su voluntad ni su capacidad de entender el alcance de sus actos. Sin embargo, un informe posterior de un psiquiatra cuestionó su imputabilidad.

La instrucción del caso, que será visto por un jurado, avanza poco a poco y ahora se está pendiente de recibir unas declaraciones por escrito de la Administración. Tanto el Gobierno de Aragón como el Ayuntamiento de Zaragoza han sido señalados por el juez como responsables civiles subsidiarios –dadas las irregularidades que se detectaron en el centro– si no responde económicamente ni la encausada ni la dueña de la residencia.