La Alfranca, abandonada desde hace seis meses

El espacio protegido, invadido por la maleza, adolece de falta de mantenimiento desde el pasado noviembre.

Árboles derribados en medio de la travesía, senderos apenas perceptibles por debajo de la vegetación y mesas de picnic cubiertas de maleza. La red de caminos de la reserva natural de los galachos de La Alfranca acusa la falta de mantenimiento que vive desde el pasado noviembre, cuando los dos trabajadores de Sarga al cargo del cuidado de este entorno protegido comenzaron el parón de dos meses que la empresa impone a sus empleados cada año.


El problema, según explican los propios afectados, es que pasados esos dos meses no les han vuelto a contratar, por lo que la vegetación avanza sin oposición y cubre caminos y áreas de descanso de La Alfranca. No solo eso, sino que también peligran los tratamientos y el seguimiento que reciben especies exóticas como los arces, un trabajo que se lleva a cabo desde hace años y que podría perderse de prolongarse la ausencia de cuidados.


La mayor parte del territorio de la reserva recae en el término municipal de Pastriz. El alcalde de la localidad, Miguel Ángel Guiu, destaca en concreto el mal estado del área de descanso de La Mejana, "zona de paseo habitual tanto de los vecinos de Pastriz como de ciclistas y gente que visita el entorno de la Alfranca", y en la que la vegetación se ha adueñado del equipamiento, una situación que se repite en otros parajes. Desde el Ayuntamiento muestran su "indignación", tanto por lo que supone descuidar un espacio natural protegido, como por la "situación de indefensión" de los trabajadores.


Por el momento, desde el Consistorio han pedido a la presidenta de la Federación Aragonesa de Municipios, Comarcas y Provincias (Famcp), Carmen Sánchez, que les informe del porqué de esta situación. Una petición a la que se suman los vecinos de La Cartuja Baja, que han visto cómo desde que se produjo la última riada del Ebro el acceso a los galachos de La Alfranca permanece "impracticable" por los restos acumulados. El alcalde, José María Lasaosa, explica que, de hecho, han decidido organizar salidas voluntarias en las que "ir limpiando y recogiendo en la medida de nuestras posibilidades".


Lasaosa destaca además el contraste que supone el deterioro del acceso a los galachos con los arreglos que Sarga llevó a cabo recientemente en el camino del Anillo Verde que conecta Zaragoza con el espacio natural de La Alfranca, y que da una idea del potencial de la reserva en caso de estar bien cuidada. "Veíamos como iba disminuyendo la afluencia por la falta de mantenimiento. Ha sido arreglarlo y volver a acudir la gente de manera masiva", recalca con entusiasmo el alcalde.

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