En el nombre del 'tupper'

"No puedo más, estoy lleno. Una cucharada más y lo dejo- ¡Qué pena que se quede ahí..! ". Estas expresiones en torno a la mesa de un restaurante caerán en desuso a partir de este viernes en ocho establecimientos hosteleros de la capital aragonesa que participan en la campaña 'Etiquetupper' de la asociación Ingeniería Sin Fronteras Aragón. A partir de ahora, lo que se estila decir es su lema: “Antes de tirar, pónmelo para llevar”.

Esta iniciativa tiene como objetivo sensibilizar acerca del desperdicio de alimentos, concienciar sobre del impacto que el actual modelo productivo y de consumo provoca en el medio ambiente y sobre la desigualdades que genera en sociedad actual.

La campaña 'Etiquetupper' pone a disposición de los restaurantes envases realizados con material ecológico para que los comensales que no puedan o no quieran terminarse la comida que han pedido puedan llevársela en un táper para consumirla más tarde, evitando que acabe en el cubo de la basura.

La iniciativa arranca este viernes en ocho establecimientos: Gallizo, La Retama, A Flama, Mali Sayo, La Otra, Barrio Sur, Bar Gallo y Madalena Rab, con el propósito de extender la campaña a otros lugares. Desde Ingeniería Sin Fronteras Aragón se anima a sumarse a todos aquellos restaurantes, bares y asociaciones que lo deseen, contactando a través de su página web o su correo electrónico.

“Cualquiera que vaya a comer a uno de estos establecimientos adscrito y no pueda o no quiera terminarse el menú, puede llevarse la comida sobrante en uno de estos envases, sin coste alguno para el comensal ni para el establecimiento hostelero”, explica Eduardo Dallo, miembro de la organización Ingeniería Sin Fronteras

“La asociación Ingeniaría Sin Fronteras Aragón ha adquirido 1.000 envases para distribuirlos gratuitamente entre los restaurantes. Lo que pretendemos es que, en la continuación de la campaña, los propios restaurantes, en lugar de optar por los tuppers de plástico escojan los de material compostable”, añade.

También en bares

Rallo avanza que cuando los envases se terminen se llevarán a cabo nuevas acciones para reunir fondos y comprar más recipientes. La asociación los suministra de manera gratuita a los restaurantes y en breve también lo hará en bares. La característica principal de estas tarteras de 'Etiquetupper' es que están realizadas en material ecológico y compostable, lo cual hace que el tiempo de biodegradación sea mucho más rápido respecto a otro tipo de envase.

Lo de pedir las sobras para llevar no es algo nuevo en los restaurantes, pero todavía existe cierto pudor a la hora de solicitarlo: “Hay gente a la que le da vergüenza cuando llega el momento de pedir llevarse la comida sobrante a casa. En España, vamos por detrás respecto a otros países de Europa, en los que ya directamente te lo ofrecen o se pide sin ningún problema. Se trata de sensibilizar y de quitarnos ese complejo”, apunta Dallo.

Desde la web de Ingeniería Sin Fronteras se recuerda que “en el mundo hay 1.000 millones de personas que pasan hambre, desechamos alimentos que pueden alimentar a 2.000 millones de personas” y que “del 50% de ese desperdicio somos responsables los consumidores”.

Además de 'Etiquetupper', Ingeniería Sin Fronteras Aragón trabaja en varios proyectos de cooperación y en campañas centradas en la gestión pública y control social del agua, el consumo responsable de alimentos o la situación actual del pueblo saharahui, entre otras.