Dos años de cárcel para el profesor que colocó cámaras en los aseos de un colegio
El autor de las grabaciones en un colegio de Zaragoza ha sido condenado a 2.700 de multa y la prohibición de trabajar con menores durante el tiempo de condena.
La Audiencia Provincial de Zaragoza ha condenado al profesor de un colegio de la capital aragonesa que instaló cámaras de vídeo en distintos aseos del centro a dos años de prisión y una multa de unos 2.700 euros como autor penalmente responsable de un delito contra la intimidad contra varias personas.
Según los hechos probados de la sentencia, de fecha 2 de marzo de 2016, el acusado Miguel Ángel P.G., de 47 años y nacido en Zaragoza, colocó cámaras de vídeo en distintos aseos del colegio en el que trabajaba para captar imágenes de personas desnudas o semidesnudas en situaciones íntimas, una de las cuales fue descubierta por la secretaria del centro el 26 de marzo de 2014.
La mujer descubrió en el servicio destinado al personal de administración y profesorado, debajo del lavabo y pegado con una masilla de color gris, un dispositivo de almacenamiento USB dotado con una cámara enfocada al servicio, en cuyos archivos se la veía a ella haciendo sus necesidades, por lo que avisó a la policía.
Cuando los agentes de la policía nacional acudieron al colegio sorprendieron al acusado saliendo apresuradamente de ese baño y fue detenido.
En una inspección en el resto de los servicios del edificio se localizaron restos de masilla en dos de ellos.
Se encontraron 22 archivos informáticos
Además, en el registro de su domicilio se encontraron 22 archivos informáticos con grabaciones realizadas a distintas personas mientras utilizan los aseos e inodoros en los que se veían sus partes íntimas, así como varios archivos borrados.
Según la sentencia, el acusado presenta un trastorno sexual o parafilia denominada "voyeurismo" y entre principios de 2013 y el 26 de marzo de 2014 instalaba un sistema de grabación en los aseos del centro escolar en el que trabajaba para captar imágenes de un número indeterminado de mujeres mientras realizaban sus necesidades, en las que se apreciaban sus partes íntimas, que posteriormente seleccionaba, clasificaba y guardaba en su ordenador personal.
El hombre también ha sido inhabilitado para trabajar con menores durante el mismo tiempo de condena.
