¿Y ahora qué?

Tras la negativa de los trabajadores a firmar el convenio, el conflicto del autobús entra en vía muerta y se llena de interrogantes. Las dudas gravitan en torno al futuro de la negociación y a la nueva posición del equipo de Gobierno de ZEC.

El alcalde Santisteve, durante un pleno municipal.
El alcalde Santisteve, durante un pleno municipal.
Oliver Duch

Los trabajadores del autobús urbano han hablado, y con su voto han rechazado la única solución viable que ha habido hasta ahora encima de la mesa de negociación del largo conflicto laboral. El ‘no’ a la firma del convenio colectivo supone un refuerzo para el comité de empresa –que pidió a la plantilla que rechazara el documento– y un duro varapalo para el equipo de Gobierno municipal, que apostó con claridad por el ‘sí’. ¿Qué pasará a partir de ahora?

La nueva situación abre un periodo de incertidumbre. Si la dirección de Auzsa y el comité de empresa cumplen con los mensajes que han lanzado durante la ‘campaña’ previa al referéndum, se antoja complicado que las negociaciones se retomen con garantías. Por su parte, el alcalde y su Gobierno deben decidir qué hacer, con un ambiente que, a partir de hoy, será de mayor presión: política en el salón de plenos y social en las marquesinas.LA NEGOCIACIÓN

¿CUÁNDO Y DÓNDE SE RETOMARÁ EL DIÁLOGO? ¿QUÉ SE NEGOCIARÁ?

La primera y principal incógnita es saber, llegados a este punto, es saber cómo, cuándo y dónde se puede retomar la negociación. Ambas partes han sido claras durante los últimos días, y las hipótesis que manejaban para este escenario son contrapuestas. El comité de empresa quiere continuar con el diálogo desde el punto en el que quedó la semana pasada. Es decir, con la propuesta que lanzó en su día el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje y que ha sido contorneada mediante la negociación entre las partes y con la mediación del Ayuntamiento –y que cuenta con la aprobación de la empresa–. Sin embargo, la dirección de Auzsa fue tajante. La concesionaria mantiene que aquella propuesta era final, y que si se rechazaba habría que "empezar de cero". No solo eso, sino que ya han avanzado que no se volverán a sentar a negociar hasta que se levanten los paros parciales.COMITÉ DE EMPRESA

¿ENDURECERÁ LOS PAROS PARCIALES? ¿CONVOCARÁ NUEVAS MOVILIZACIONES?

Se espera que el comité de empresa tome nuevas iniciativas a partir de ahora. No se descarta, incluso, que se endurezcan los paros parciales. En contra de esta posibilidad está el grave menoscabo que está suponiendo la huelga para los bolsillos de los conductores –cuantas más horas duren los paros, menos cobran a final de mes–. Sin embargo, sí podrían tomar nuevas iniciativas de movilización. Además, el comité estudia llevar la negociación del convenio a la Dirección General de Trabajo, buscando así la implicación del Gobierno de Aragón, algo que ya han pedido sin éxito en anteriores ocasiones –incluso, el comité de empresa llegaron a comparecer en la Comisión de Comparecencias y Peticiones de las Cortes de Aragón–.EL AYUNTAMIENTO

¿SE DESVINCULARÁ DEL CONFLICTO? ¿AUMENTARÁ LOS SERVICIOS MÍNIMOS?

El Ayuntamiento tenía depositadas muchas esperanzas en el referéndum sobre el convenio, ya que lo venían como la solución ideal para todas las partes. El equipo de Gobierno de ZEC pidió a la plantilla el ‘sí’, y contaba con el apoyo de algunos de los sindicatos del comité. Sin embargo, finalmente ninguno hizo campaña por el sí. La semana pasada, durante la negociación en la sala de Gobierno de la Casa Consistorial, el propio alcalde advirtió a los representantes de los trabajadores de que se quedarían solos a partir de ahora en caso de rechazar la última propuesta de convenio colectivo. Los concejales Alberto Cubero y Teresa Artigas lo han confirmado en una carta abierta a los trabajadores: "Si finalmente esta propuesta no es aceptada por los trabajadores, el Gobierno daría un paso atrás en la mediación y presión hacia la empresa, pues entendemos que nada más podemos hacer", señalan.

Está por ver si este desencuentro con el comité de empresa se trasluce en un incremento de los servicios mínimos, fijados desde el principio en un 33%. El equipo de Gobierno se ha negado desde el principio a elevarlos, a pesar de que el pleno municipal se lo ha pedido en dos ocasiones. Sin embargo, según fuentes cercanas a la negociación, ZEC se podría plantear un cambio de posición si se confirma el enquistamiento del conflicto y si no se vislumbra una posible solución. Sin embargo, este extremo no ha sido confirmado por ningún miembro del equipo de Gobierno.SITUACIÓN POLÍTICA

¿QUÉ POSICIÓN ADOPTARÁ LA OPOSICIÓN EN EL PLENO EXTRAORDINARIO?

Se espera que hoy mismo los grupos de la oposición anuncien la solicitud de convocatoria de un pleno extraordinario. PP, PSOE, Ciudadanos y CHA –todos los grupos con representación en el pleno salvo ZEC– incluso llegaron a dar una rueda de prensa conjunta advirtiendo de que lo harían si no había una solución inminente al conflicto. Falta por concretar qué contenido tendrá el pleno y si, por ejemplo, el pleno exigirá dimisiones o ceses.LOS USUARIOS

¿MANTENDRÁN LA PACIENCIA? ¿SEGUIRÁ LA ‘FUGA’ DE VIAJEROS?

A pesar de la paciencia que han tenido los usuarios del autobús urbano se han registrado numerosos incidentes en el interior de los autobuses. Solo durante los tres primeros meses, la Policía Local tuvo que intervenir en 47 ocasiones para que no los enfrentamientos no fueran a más. Cuanto más se prolongue el conflicto, mayor es el riesgo, sobre todo si se radicalizan los paros. Mientras tanto, el servicio se seguirá resintiendo. De momento, ya hay un 20% de viajeros que se han buscado la vida para moverse de otra manera por la ciudad.

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