A la segunda va la vencida. Esta vez no se ha cumplido el popular refrán, para regocijo de los responsables del Gobierno de Zaragoza. La intención del equipo de Zaragoza en Común (ZEC) de deshacerse de cinco de los vehículos marca Audi (uno modelo A-8 y cuatro A-6) que utilizaban con frecuencia sus antecesores por fin ha despertado el interés de empresas y particulares. El Ayuntamiento de la capital aragonesa ha tenido que lanzar dos veces el proceso de venta pero parece que por fin va a poder deshacerse de unos vehículos que, según los responsables de ZEC, son “innecesarios” para el servicio público.

En la web del Consistorio se da cuenta de hasta cinco interesados en hacerse con el lote único de los vehículos adscritos al área de Alcaldía cuyo precio de salida (los licitadores han tenido que presentar ofertas al alza) se había fijado en 21.093 euros. Esto suponía una rebaja superior a los 7.000 euros con respecto al primer precio de salida, fijado a finales de octubre en 28.124 euros.

Las personas que se han interesado en ser los nuevos propietarios de estos vehículos de alta gama son tres particulares y dos empresas, concretamente se trata de dos concesionarios que operan en la capital aragonesa.

El procedimiento elegido por los responsables municipales para deshacerse de estos bienes fue el de venta directa y la adjudicación seguiría un único criterio. “A falta de otras consideraciones que permitan una valoración de las posibles ofertas, se efectuará a favor de la que ofrezca un precio de compra más elevado”, constaba en el decreto de enajenación.

En ese mismo documento, firmado por Fernando Rivarés el pasado 9 de febrero, ZEC establecía un 'plan b' en el caso de que no hubiera interesados. No era otro que deshacer el lote de cinco vehículos y proceder a la venta de cada uno de ellos por separado.

Habrá de esperar para conocer qué oferta es la mejor y quién se queda con los vehículos que han permanecido desde hace más de diez años en los garajes del Ayuntamiento de Zaragoza y han trasladado, entre otros, al exalcalde Juan Alberto Belloch, que se solía trasladar en el modelo A8.