La última exhalación de los aparcabicis de Franco y López
Varios vecinos han denunciado el deterioro de la instalación al ser golpeados por los coches que entran y salen de la zona de aparcamiento.
Había diez, el lunes quedan tres, el martes dos... y contando sus últimos días probablemente, ya que la hilera de aparcabicis de la calle Franco y López número 30, en la esquina con la calle Martín Cortés, en el barrio de las Delicias, ha ido mermando paulatinamente, y los soportes de los arcos ya están buena parte de ellos levantados.
"En pocos días nos han llegado distintas quejas de vecinos y ya lo hemos trasladado al Ayuntamiento", explican desde la plataforma Zaragoza Ciudadana. "No es lógico que se ponga un aparcabicis sin apenas espacio con los coches, porque el coche tiende a coger toda la parte posible para aparcar", comentan.
"Cuando los aparcabicis están a nivel de la calzada, si la gente se fija poco le dan, sobre todo si no hay bicis aparcadas en ese momento", explican por su parte desde el colectivo Pedalea, desde donde animan a los usuarios a comunicar los puntos en los que estas instalaciones estén rotas o en mal estado. "Nosotros enviamos la queja a la Oficina de la Bici y generalmente los cambian, si nadie se queja porque no los usa mucha gente se quedan ahí".
Desde Pedalea explican que a veces, aunque los aparcabicis estén bien delimitados, también se acaban dañando, "si le dan lateralmente se tiran, pero generalmente la gente aparca de oído y le va dando por detrás y al final se tiran".
En situación similar a los de Franco y López se encuentran los de la calle Manuel Serrano Sanz, en este caso ubicados junto a unos contenedores de basura.
