El Ayuntamiento rechaza el cambio de uso de un terreno para construir una gran mezquita

“Nos cierran todas las puertas”, critica el representante de este colectivo en Zaragoza, que sigue buscando ubicaciones.

La comunidad islámica pide espacio para ejercer el culto. En la imagen, la mezquita del Arrabal.
La comunidad islámica pide espacio para ejercer el culto. En la imagen, la mezquita del Arrabal.
G. Mestre

El Ayuntamiento de Zaragoza ha rechazado la solicitud de la Comunidad Islámica de Zaragoza para cambiar de industrial a equipamiento religioso el uso de un terreno de su término municipal. La parcela en cuestión se ubica en la carretera de Madrid, cerca del centro de Atades. La resolución está incluida en el orden del día de la Comisión de Urbanismo que tendrá lugar este jueves.


De esta forma, el Consistorio de la ciudad frena de nuevo una de las reivindicaciones históricas de este colectivo, que aglutina a más de 25.000 residentes: la de construir un gran centro cultural islámico. En concreto, buscan un terreno de grandes dimensiones donde ofrecer servicios como comedor social, centro de reunión, talleres e incluso gimnasio, donde el espacio dedicado al culto no ocuparía más del 20% de la nueva infraestructura.


La postura del equipo de Gobierno de Zaragoza en Común, aunque esperada, ha caído como un jarro de agua fría entre los afectados. “Sabíamos de antemano que no nos lo iban a dar, pero no lo compartimos”, lamenta Fawaz Nahhas, representante de la Comunidad Islámica de Zaragoza.


Tras intentar una cesión de terreno, han probado con el cambio de uso de industrial a servicios, con el mismo resultado. “Nos cierran todas las puertas, ni ceden ni colaboran para el cambio de uso. Esperábamos algo más del actual Gobierno municipal”, critica.


Nahhas apunta que “la ley dice que los ayuntamientos deben ceder terrenos a las comunidades religiosas”, y recuerda que “otras confesiones sí lo han conseguido”. La comunidad islámica cuenta con cerca de 55.000 fieles en Aragón, de los que más de 25.000 residen en Zaragoza. “Tenemos muchas necesidades que tras 45 años en la ciudad no se han cubierto”, señala.


Además, cree que la actual fragmentación de la Corporación no ayuda a su causa, y critica que “encontramos buenas palabras pero no hechos”.


Numerosas peticiones


Su reclamación viene de lejos. Ya en 2011 tuvieron que desistir de comprar el antiguo colegio Lestonnac de Torrero, tras el desalojo de 'okupas' que realizó la Policía Local, lo que perjudicó su causa. Pero no son los únicos. Hace poco más de un año el Ayuntamiento dio a conocer 25 peticiones de suelo por parte de entidades religiosas, culturales y deportivas.


El Arzobispado de Zaragoza, los Testigos de Jehová, o diferentes iglesias evangélicas pidieron sus parcelas. Pero también se solicitaron espacios para una residencia de ancianos, instalaciones de pádel o una escuela infantil. La mayoría de estas peticiones siguen bloqueadas.

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