El consejero municipal de Servicios Públicos y Personal del Ayuntamiento de Zaragoza, Alberto Cubero, ha considerado que "es lógica y justa" la petición del aumento salarial del 1% de los trabajadores del sector de la limpieza de edificios públicos que tienen unas nóminas que oscilan entre los 600 y los 800 euros mensuales.

Cubero ha recibido a una delegación de trabajadoras que le han transmitido su inquietud después de que este lunes no se llegara a un acuerdo entre la patronal del sector de limpieza y los sindicatos ante el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA) por lo que el convenio no se renovará en enero de 2016 y afectará a unas 10.000 personas en la provincia de Zaragoza, de las que unas mil trabajan para el Ayuntamiento de la capital aragonesa.

Eso supondrán que a tenor de lo aplicado en la reforma laboral se les aplicará el Estatuto de los Trabajadores por lo que percibirán "un tercio menos del sueldo que cobrar ahora" y que oscila entre los 600 y 800 euros mensuales, a jornada completa "lo que supone salarios de auténtica miseria", ha descrito Cubero.

En declaraciones a los medios de comunicación tras reunirse con las trabajadoras, Cubero ha señalado que esta falta de acuerdo para renovar el convenio colectivo de un sector "absolutamente precarizado y temporalizado no es solo un chantaje a las trabajadoras, sino que también el Ayuntamiento nos sentimos chantajeados porque más de mil personas trabajan para Zaragoza y el apoyo es del conjunto de los ciudadanos", ha puntualizado.

Cubero ha subrayado que además "nos sorprende que SAMA se ventilara el convenio en una hora para 10.000 trabajadores de la provincia y exigimos más responsabilidad al SAMA y a las administraciones públicas de Aragón que tienen a personas trabajando para ellas".

Ha aclarado que además de chantajeados "la relación con las empresas empeora de forma absoluta y nos planteamos analizar técnicamente cómo hacer que estas empresas no vuelvan a trabajar en el Ayuntamiento porque el chantaje es inasumible" para recalcar que analizará técnicamente los pliegos de condiciones para que "empresas que se permiten aminorar las condiciones de los trabajadores no vuelvan a trabajar en el Ayuntamiento".

"No les voy a llevar a la ruina"

A colación, ha pedido unir fuerzas de otras administraciones para apoyar "las reivindicaciones justas de los trabajadores y desbloquear el convenio de la patronal de limpieza que obtienen beneficios multimillonarios, pero tienen bloqueadas a las 10.000 trabajadoras de la provincia".

Cubero ha reconocido que próximamente no hay pliegos a licitar, pero "la relación con estas empresas cambia sustancialmente y se pueden considerar como empresas 'non gratas' y estaremos muy pendientes de los pliegos a partir de ahora".

La trabajadora del sector de la limpieza, María Ángeles Villagrasa, ha explicado que la negociación está rota "porque la inmovilidad de la empresa es total y absoluta y hemos hecho concesiones en más de un año de negociación y ahora ya solamente pedimos una subida mínima, que son 10 barras de pan, y las empresas no son capaces de dar una respuesta para esas migajas".

Villagrasa ha precisado que pedían un 0,3% de subida para 2015 y "lo han dado por muerto y en 2016 pedíamos un aumento del 1% aunque antes era 1,20%, pero da igual porque la empresa no mueve absolutamente nada".

En tono irónico ha dicho que "me daría igual el 1 que pedir la luna" para apostillar que "no se si es un pulso que nos echan, pero lo que se es que no les voy a llevar a la ruina por lo que pido, os lo puedo asegurar".

Finalmente, ha anunciado que "esto no acaba aquí y seguiremos luchando y, de momento, nuestro convenio no está muerto aunque lo quieran matar".

Tras atender a los medios de comunicación, el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, ha salido para escuchar las demandas de estas trabajadoras, junto al consejero municipal de Economía y Cultura, Fernando Rivarés.