La tradición aragonesa de la Tronca de Navidad ha vuelto este sábado a Zaragoza de la mano de las actividades promocionadas por las asociaciones de comerciantes del entorno del Casco Histórico. 

Pese al frío, Isabel, una acogedora cuentacuentos, ha conseguido reunir en la plaza de San Pedro Nolasco a varias decenas de niños entorno a una improvisada chimenea. 

Con la ayuda de su libro parlante ha contado a padres e hijos la historia de 'Francho y la tronca de Navidad', dando a conocer a los zaragozanos más pequeños una tradición aragonesa que ya casi se ha olvidado en la capital. 

Conforme avanzaba el cuento aumentaban en los niños las ganas de caramelos y, al acabar, han podido pronunciar ellos mismos el conjuro '¡Caga tronca, caga!' y poner a prueba los poderes de una auténtica tronca de Aragón.. 

Por supuesto la zoca no ha defraudado y aunque las llamas eran falsas y la chimenea de tela, el tizón ha escupido caramelos igual que en las casas de los pocos pueblos donde todavía perdura la tradición.