El paseo central de Tarazona, en la margen izquierda del río Queiles, se convierte en peatonal durante parte de los fines de semana de agosto. En realidad son sólo 24 horas, pero es una medida que ha calado bien entre vecinos y turistas.

Esta iniciativa responde a las demandas del sector comercial, y coincide con el periodo de mayor afluencia de gente en la ciudad. De esta forma, hasta que terminen las fiestas patronales de Tarazona, el próximo 1 de septiembre, el Paseo Constitución y parte del Paseo Fueros de Aragón quedarán cerrados al tráfico desde las 20.30 del sábado hasta las 20.300 del domingo.

“Viendo la afluencia de gente que había en agosto, mes de vacaciones, se ha decidido desde el Ayuntamiento cerrar al tráfico rodado el paseo. La idea es facilitar una zona de tránsito muy céntrica en nuestra ciudad, lugar de paso y concurrencia para gente de todas las edades”, confirma Ana Calvo, concejal de Comercio.

Se ha tenido en cuenta que las ocho de la tarde es la hora de cierre de los comercios de la zona, y se ha consensuado con ellos esta decisión “porque entendemos que a las horas de carga y descarga es perjudicial cerrar esta zona”.

En principio lo que se ha planificado y lo que se va a llevar a cabo es únicamente este mes de agosto. El tiempo dirá si la medida se mantiene, aunque el equipo de gobierno ya se planteó en la anterior legislatura un proyecto para reestructurar toda esta zona y convertirla en peatonal de forma permanente. Falta buscar la fórmula adecuada para que no se perjudique a los numerosos establecimientos que se concentran en esta área, punto neurálgico de la ciudad.