La DGA retiró en 2012 a la residencia Santa Fe el permiso provisional de apertura

Así lo ha informado la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales del Gobierno de Aragón.

Mariví Broto, en imagen de archivo
Mariví Broto, en imagen de archivo
Heraldo

El Gobierno de Aragón había retirado en septiembre de 2012 el permiso provisional de apertura favorable a la residencia Santa Fe de Zaragoza en la que la noche del pasado sábado fallecieron ocho internos a consecuencia de un incendio, según ha informado este lunes la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales de la DGA, María Victoria Broto.


La responsable del Gobierno aragonés ha explicado a los medios de comunicación que la residencia Santa Fe obtuvo en 1997 el permiso provisional de apertura y, desde entonces, en las revisiones de los años 2006 y 2011 se detectaron algunas "deficiencias de mantenimiento e higiénicosanitarias".


En ese año 2011, según Broto, se dio al centro geriátrico un plazo de doce meses para que subsanaran las irregularidades detectadas, más un mes para realizar los trámites burocráticos necesarios para poner al día la residencia. Sin embargo,  este periodo expiró sin que se hubieran realizado estos trámites. Por este motivo, según ha informado la consejera Broto, en 2012 se retiró el permiso provisional de apertura favorable a la residencia Santa Fe.   


Desde esa fecha, el centro geriátrico ubicado en el zaragozano barrio de Santa Fe se encontraba en "un proceso administrativo muy complejo", según palabras de Sebastián Celaya, consejero de Sanidad.  Asimismo han asegurado que en el momento en el que se retira este permiso favorable, no se produce un cierre inmediato. "Hay un periodo de alegaciones y otras acciones antes", ha recalcado Broto. 


Ante las insistentes preguntas sobre si la residencia debería estar cerrada, Celaya ha explicado que no pueden aclarar nada más puesto que todavía están en una fase incipiente de la investigación. Por su parte, Broto ha reiterado en más de una ocasión que "es algo administrativamente complejo". 


No obstante, sí que han afirmado que la residencia cumplía todas las normativas relativas al personal y que la situación del sistema de antiincendios corresponde al Ayuntamiento de Zaragoza. 


El consejero de Sanidad ha recordado que en los últimos 4 años se ha hablado mucho sobre la situación de las residencias, puesto que "había muchas que no cumplían las condiciones necesarias y se debían cerrar". Esta cuestión la ha ejemplificado con el cierre de un centro geriátrico en Teruel, otro en Huesca y un tercero en Movera.

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