Compras y paseos en el Día de la Madre
Comercios y grandes superficies han permaneceido abiertos este domingo en la capital aragonesa.
Con un cielo encapotado que, en principio, no invitaba a salir de casa, el centro de la capital aragonesa ha vuelto a registrar durante las primeras horas del día una notable afluencia de viandantes que han aprovechado la apertura de comercios en este día festivo para comprar esos últimos regalos para el Día de la Madre.
Las flores son uno de los regalos estrella en esta festividad, y las floristerías procuran ofrecer a sus clientes una amplia oferta de plantas y flores para regalar a sus seres queridos, aunque no siempre hay suerte: "Yo estoy buscando un naranjo pero aquí solo tienen un mandarino", se lamentaba María Pastor, una joven zaragozana que va de tienda en tienda en busca de este árbol frutal para regalar a su madre.
En la librería de unos grandes almacenes, en el paseo de la Independencia, Félix ha encontrado un detalle para su madre: "Es muy devota de Juan Pablo II y esta biografía le va a encanar", afirmaba satisfecho.
Para María Pastor, la tarea era aún más complicada, y apuraba las horas previas a la comida en busca de dos regalos: "Además del Día de la Madre también es el cumpleaños de mi padre y sigo sin encontrar nada para ellos".
Entre los cientos de personas que transitaban por el centro de la ciudad, se adivinaba una misma expresión, un mismo gesto: regalar y compartir en familia una fiesta tan especial, el Día de la Madre, aunque en realidad sea todos los días.
