Parque Venecia, el Arrabal, Valdespartera y Oliver siguen sin las marquesinas prometidas

El Ayuntamiento anunció la instalación de quince marquesinas. Faltan seis por colocar y el descontento vecinal se hace notar en los barrios.

Una parada de autobús sin marquesina.
Una parada de autobús sin marquesina.
A. NAVARRO

Parque Venecia, el Arrabal, Arcosur, Valdespartera y Oliver son algunos de los barrios en los que todavía no se han instalado las marquesinas en las paradas de los autobuses urbanos prometidas por el Ayuntamiento de Zaragoza. 


El consistorio anunció en octubre de 2014 que instalaría 15 marquesinas en diferentes barrios de la ciudad tras la reordenación de las líneas de autobús


Según fuentes municipales, se han instalado nueve de las quince marquesinas comprometidas. Pero, todavía faltan seis: en la calle de San Alberto Magno, en el barrio Oliver; en la calle Carlo Scarpa en Parque Venecia; en Valdespartera en la calle Ciudadano Kane; en El Arrabal falta una en la calle de Sobrarbe, en la zona centro, donde tendría que ubicarse en el paseo de Pamplona y en Arcosur, en calle de Catedral de Santiago o Lonja de la Seda.


Desde Parque Venecia, el presidente de la asociación de vecinos, José Antonio Andrés, recuerda que en octubre de 2012 se solicitó al Ayuntamiento la instalación de la marquesina. "Llegaron a talar un árbol y aún sigue la marca en el suelo donde debería estar la marquesina", detalla Jesús Jiménez, un vecino del barrio. Lo peor, dice Jiménez, "es que no nos hacen ni caso y las pocas explicaciones que llegan son absurdas". Por su parte, Andrés explica que, además de la solicitada también sería conveniente instalar una en la calle Tiziano, en la parada del 31 porque "da servicio con el centro de la ciudad". 


Jiménez critica que sí se instalan marquesinas en sitios menos prioritarios. "En la calle Avenida de la Policía, en el final de la parada del 31, colocaron una cuando es más necesaria en el final de la línea 23 de la calle Carlo Scarpa", asegura: "Esta parada es mucho más transitada". Jiménez lamenta que desde el consistorio zaragozano "no se nos dé ninguna explicación".


Manuel Clavero, presidente del barrio de Oliver, critica que aún no se haya instalado la marquesina que se les prometió en la calle de San Alberto Magno. "Es la que más falta hace porque es principio y final de línea y al ser la parada del Centro de Salud del barrio es la más transitada", dice. "Es necesario que haya un elemento de protección para que la gente no esté a la intemperie", señala Clavero. 


El enfado se extiende a los otros barrios que, a pesar de no estar en la lista de las quince marquesinas comprometidas por el Ayuntamiento, también piden su instalación. "Nunca nos han dicho con claridad si las iban a instalar o no", dice el presidente de la asociación de vecinos de Vadorrey, Pablo Polo: "Siempre andan con excusas falsas", sentencia. Polo explica que desde el Ayuntamiento argumentan que no pueden instalar la marquesina en las paradas del puente de la Unión porque no hay suficiente espacio. Pero, el presidente de Vadorrey afirma que "esa justificación denota un desconocimiento de la zona porque con el mismo ancho de acera hay instaladas otras marquesinas en otras áreas del barrio".


La falta de marquesinas hace que muchos vecinos de Vadorrey opten por otro medio de transporte que no sea el autobús. "Es una pena porque la línea de bus funciona perfectamente. El problema es que el frío del invierno, las lluvias, el fuerte viento de Zaragoza y ahora el calor asfixiante del verano hacen insoportable la espera", explica Polo.


El caso del Actur es similar. Uno de sus representante, Julio Murillo, señala que "el asunto va lento" y que siguen "sin marquesinas en las grandes avenidas del barrio, como la calle María Zambrano y Gertrudis Gómez de Avellaneda, que son las más utilizadas". Murillo explica que desde Servicios Públicos del Ayuntamiento se escudan en el problema de la estrechez de algunas de las aceras.


Por su parte, el presidente del barrio El Arrabal, Rafael Tejedor, asegura que les "prometieron tres marquesinas". Fuentes del Ayuntamiento aclaran que se ha instalado una de las prometidas en la plaza de Mozart de este barrio y que sí faltaría por instalar una en la la calle de Sobrarbe.


Tejedor explica que la contrata de la empresa que se dedica al mantenimiento de las marquesinas está en prórroga. "No debe de interesar poner más marquesinas porque la publicidad en mobiliario urbano vive malos tiempos", concluye. 


Por su parte, fuentes municipales explican que si no se han instalado todavía las quince marquesinas pactadas con los barrios se debe a motivos técnicos, pero aseguran que no tardarán en llegar.