"Tienen que limpiar el Ebro ya, no es justo que en 10 años haya tenido que dejar mi casa 3 veces"

Miles de ribereños se han manifestado en Zaragoza por los daños causados por el río.

Manifestación por la limpieza del Ebro
Manifestación por la limpieza del Ebro
M. S.

Miles de vecinos de la ribera del Ebro se han dado cita este domingo en la plaza Aragón para mostrar su rechazo ante el control de la situación del Ebro y la falta de previsión. "No es normal que a los habitantes 

de Boquiñeni les dijeran que todo estaba bien y media hora después tuvieran que abandonar sus casas", se lamentaba Ascensión, que aunque vive en Zaragoza tiene buena parte de su familia en Boquiñeni. 


Ahora, más de un mes después, la situación tampoco es mucho mejor. "Se tuvieron que ir de sus casas y aunque han vuelto, tienen todo con humedades y los muebles destrozados", relataba. Asimismo, recordaba que los vecinos de este municipio ribereño todavía no tienen agua de boca. "Seguramente muchos de los responsables no vivirían en una situación como esta", aseguraba. 


Con el rastro del agua todavía patente vive Maite, una vecina de Alfajarín, que recordaba que en su casa todavía hay humedades de toda el agua que le entró. Además de las viviendas, los cultivos y las granjas fueron los grandes perjudicados de esta riada, que tiene unos costes que rondan los 50 millones de euros.


"En Quinto de Ebro todavía tenemos campos con un palmo de agua, además de que el sistema de riegos, los caminos y buena parte de las motas están destrozados", lamentaba Ramón, que ha tenido que ver cómo sus tierras se anegaban y perdía buena parte de sus cultivos. "Hasta después del verano ya no se podrá plantar nada", aseguraba. Al mismo tiempo, destacaba que para que esto ocurra será necesario que se arreglen los caminos, para que se pueda llegar a los campos, y el sistema de riego, "hasta entonces, será imposible volver a sembrar". 


También ha habido algunos habitantes cuyas pertenencias han tenido mejor suerte. "En esta ocasión no ha entrado agua en casa, pero aún así, llevamos tres desalojos en solo 10 años. No es justo", recalcaba Elena, que vive en Pradilla de Ebro. Para ella, lo más importante es que se realice la limpieza integral del río, "pero no de forma puntual, sino con un plan que asegure que se puede vivir en los municipios limítrofes para siempre". 


Los afectados no han estado solos en su lucha por la limpieza del Ebro. Vecinos de otros municipios en los que finalmente no apareció el agua, e incluso, algunos que nunca han sufrido ninguna afección han recorrido Zaragoza a su lado. "Hemos venido para que solucionen este grave problema porque aunque en Pina de Ebro el río no ha entrado esta vez, lo hemos sufrido en alguna ocasión", aseguraba Esperanza. 


Además muchos ayuntamientos han ayudado a difundir la manifestación. "Por ejemplo en Quinto se publicó en el bando para que viniéramos todos a apoyar la marcha", recalcaba Ramón. Otros han puesto a disposición de sus habitantes varios autobuses para que pudieran trasladarse desde su lugar de origen hasta Zaragoza.