El PSOE no logra apoyos para su plan de pisos baratos y el PP se queda solo en sus propuestas

La falta de acuerdo entre PP y PSOE permite a CHAe IU frustrar sus principales propuestas de resolución.

El portavoz socialista protagonizó su primer debate como candidato. Anadón, aunque vio como se rechazaba su propuesta estrella, se benefició de que Belloch no le hiciera sombra
El PSOE no logra apoyos para su plan de pisos baratos y el PP se queda solo en sus propuestas
Oliver Duch

Si la primera jornada del debate sobre el estado de la ciudad estuvo marcada por los discursos de PP y PSOE, en la votación de las propuestas ganó, como siempre, la aritmética. Y con los grandes partidos sin mayoría suficiente en el pleno, los minoritarios, CHA e IU, jugaron sus bazas para imponer su ley. El portavoz y aspirante socialista, Carlos Pérez Anadón, no logró que prosperara su iniciativa estrella de pisos baratos para jóvenes mediante la fórmula de la cesión de un derecho de superficie sobre solares públicos. El PP recibió también también su castigo: ni una de sus seis propuestas obtuvo apoyo por parte de los grupos de izquierda, por lo que decayeron.


El choque de trenes socialista y popular facilitó el desenlace, dado que ninguno de los dos suma por sí solo los 16 votos que dan la mayoría del pleno. Como los socialistas y los populares se negaron a respaldar ni una sola de las propuestas del adversario, dejaron a CHA e IU la oportunidad de decidir y desquitarse por la vía aritmética del protagonismo de PP y PSOE en la primera sesión del debate sobre la ciudad.


Pérez Anadón no pudo hacer una demostración de fuerza ante el PP porque los minoritarios le aguaron la fiesta con sus dos propuestas más novedosas. No en vano, el portavoz de IU, José Manuel Alonso, renegó del papel "de comparsas" y avisó: "Ni aceptamos la tutela del PSOE ni que el PP nos relegue a un tripartito porque no queremos sus propuestas". Fue una advertencia de lo que iba a pasar después.


La principal iniciativa con la que se presentó Pérez Anadón al debate, vinculada además con su área de gestión, Urbanismo, consistía en un plan en el que a través de un derecho de superficie por un número limitado de años se cedía suelo a particulares para que construyeran sus viviendas. Al restarse el valor del solar, los pisos pueden edificarse por precio más reducido (unos 50.000 euros, según Carlos Pérez Anadón, para uno de dos habitaciones). Con esta propuesta se trataba de atender las necesidades de pisos baratos del sector joven, según los socialistas.


Pero para vencer las reticencias que suelen expresar los particulares a los derechos de superficie, el PSOE abrió la posibilidad de habilitar una fórmula para que los interesados se pudieran hacer con la propiedad del inmueble. CHA e IU se agarraron a esta cuestión para tumbar el proyecto (los primeros con su voto en contra y los segundos con la abstención). Sí aceptaron una segunda parte de la propuesta, de carácter menor, para estudiar esta fórmula con usos industriales y de servicios.


Pero no fue el único palo que se llevó Pérez Anadón. Una abstención de IU por sorpresa frustró una de sus iniciativas más novedosas: la posibilidad de votar de forma presencial algunos asuntos relevantes de la ciudad. Pese a que CHA había enmendado la propuesta planteando que la decisión de las consultas fueran vinculantes, a IU no le pareció suficiente. Alonso exigió más "audacia" y calificó la actitud de los socialistas de "tibia".Tarifa plana de impuestos


CHA e IU se dieron el gusto también de aceptar otra de las propuestas estrellas de Pérez Anadón recordándole que había sido idea del PP. Se trataba de la tarifa plana de impuestos, cuyo pago se repartiría en 12 meses. Los populares echaron sal en la herida al refrescarle la memoria al candidato socialista y explicarle que su iniciativa se quedó en nueve meses después de que el vicealcalde y concejal de Economía, el socialista Fernando Gimeno, dijera que repartir el pago de impuestos en 12 meses era técnicamente "imposible", como explicó el portavoz del PP, Eloy Suárez. Para salvar la situación, Pérez Anadón trató de restar importancia a la "paternidad" de las ideas.


IU y CHA admitieron el resto de propuestas socialistas. Se aprobó la creación de la Film Comission para asesorar a las productoras de cine o publicidad para rodar en Zaragoza. Eso sí, se trata de una vieja idea del alcalde, Juan Alberto Belloch, que se remonta a 2004 y que nunca se llevó a cabo. Se aprobó un plan para garantizar mínimos vitales de alimentación, vivienda, energía, tasas, becas o viviendas y su propuesta de "reflexión" sobre el plan de movilidad y la línea dos de tranvía.


Aunque entraba dentro de lo previsible en un Ayuntamiento con mayoría de izquierdas, el PP también salió trasquilado. CHA e IU optaron por sumar sus votos al PSOE y ejercer de tripartito para frenar todas las iniciativas populares. Con el argumento principal de que el PP "no tiene credibilidad" para hacer determinadas propuestas, por su gestión en otras administraciones, le tumbaron su petición de suprimir los coches oficiales, de impulsar un plan de rehabilitación mediante rebajas fiscales, restringir las subvenciones directas y limitar al 20% las partidas de personal y gestión en este tipo de ayudas sociales. Los populares también defendieron que haya un informe de gastos de los servicios municipales, una auditoría de las obras del tranvía, aprobar una ordenanza de emprendedores o rebajar la plusvalía y el IBI.


El PP se quejó amargamente de la actitud del resto."El tripartito funciona a la perfección. Lamento que esté más unido que nunca para tumbar nuestras iniciativas", afirmó Suárez resignado, mientras criticó que los grupos de izquierdas acusen al PP de no querer "construir" cuando rechazan todas sus iniciativas. Pérez Anadón se quedó con la satisfacción íntima de ver cómo todas las propuestas de su rival se iban al traste."A la búsqueda de consensos hay que venir preparado. Si se quiere meter el dedo en el ojo es difícil", afirmó el candidato y portavoz socialista.


Fue inevitable el rifirrafe. Mientras Suárez recordaba que tiene "la legitimidad de 130.000 votos" y acusaba a Pérez Anadón de no haberse presentado "nunca a nada", el socialista le replicaba: "Usted lleva mucho en política y lo que no tiene es experiencia en gestionar y se le nota bastante".Escasos acuerdos


CHA e IU se movieron sin demasiados problemas en un escenario en que todas las decisiones pasaban por sus manos por el enfrentamiento entre PSOE y PP, sobre todo los nacionalistas. CHA había planteado propuestas concretas, difíciles de rechazar, como mejorar los accesos a Parque Venecia, aprobar el proyecto de la avenida de Cataluña o estudiar el modelo de ‘supermanzanas’, que ya existe por ejemplo en Vitoria. Todas sus iniciativas salieron aprobadas, bien por el apoyo de PSOE e IU, bien por unanimidad.


Por su parte, IU vio cómo decaían algunas de sus propuestas, como la de romper relaciones con la Sareb (banco malo) o la creación de un registro de vivienda vacía. "Hay buena intención pero son poco realizables", le dijo a Alonso el socialista Carlos Pérez. Pero IU no se sintió incómoda con el rechazo en su búsqueda de la izquierda alternativa.


Con la tradición de las confusas votaciones y el lío de transaccionales, el debate se fue diluyendo. Pocos acuerdos con sustancia y la mayoría descafeinados, en un debate que no pasará a la historia por su contenido, pero sí por su tono. Todos los partidos dibujaron una estrategia que evolucionará en los próximos meses con un objetivo final: las elecciones municipales del 24 de mayo.