Frenética batida en retirada

El alcalde Belloch intensifica su agenda para que nadie le acuse de que ya no ejerce. Ayer comenzó donando sangre y acabó cocinando tiramisú con Mari Cruz.

Belloch y Mari Cruz Soriano, anoche en el restaurante Aura.
Frenética batida en retirada
F. Jiménez

Empezó donando sangre a primera hora de la mañana y acabó recuperándola con una opípara cena, que él mismo cocinó, ya entrada la noche.

El alcalde Belloch presumió ayer de agenda frenética, acaso para acallar a quienes dicen que ya no ejerce y que está en retirada. Además, en ‘petit comité’, Belloch advirtió ayer que no va a darse de baja de la vida social zaragozana y, aunque no le hagan pasillo ni vaya en coche oficial, continuará ejerciendo de exalcalde, "como ya ejerzo de exministro", bromeó. "Hay cargos que te acompañan siempre y pienso seguir disfrutando de todo lo que ofrece la ciudad. Aunque ya no pueda presenciar las fiestas desde el balcón, seguiré participando en ellas desde abajo, en la plaza", dijo el alcalde que, como es sabido, no aspira a la reelección y apura ya sus últimos meses en el cargo. Y qué meses, porque Belloch, al que antaño se acusaba de ser poco rocero y apenas pisar la calle, lleva unas semanas ‘non stop’. Además de cumplir con su promesa/amenaza de visitar todos los barrios rurales, el mejor botón de muestra son los cinco actos que ayer reflejaba su agenda oficial, cuando lo habitual es que esta ni siquiera se envíe a los medios porque... no hay mucho que contar. Cómo no será la frenética actividad de este alcalde en retirada ¡que hasta ha resucitado su cuenta de Twitter!


Ayer Belloch comenzó celebrando que "la solidaridad no está en crisis" en su loable y habitual colaboración con los Donantes de Sangre y, casi sin tiempo de reponerse, se fue raudo y veloz a presentar el nuevo diccionario de la RAE, junto a José Manuel Blecua. Allí, a las puertas del Pablo Gargallo, el alcalde no perdió oportunidad de hacerse una foto de familia con un grupo de chavales que salían de visitar el museo. Acto seguido, comisión ejecutiva de Mercazaragoza y, ya por la tarde, entrega del premio Proyecto Hombre a la Solidaridad.

Esta mañana también tendrá un ‘sarao’ semejante al recibir a los funcionarios del Ayuntamiento que se ha jubilado este año. Confiemos en que su reencuentro con Corita brinde emotivas estampas.


No obstante, el acto más simpático (y cotillica) de la agenda del primer edil ayer fue la participación en el proyecto Cocina Solidaria que ha ideado el Restaurante Aura. Mandil en ristre, Belloch se arremangó para demostrar sus dotes culinarias, aunque -como evidencia el ‘tiramisú de Mari Cruz’- parece que le echaron alguna que otra mano... ¿Qué cocinó el alcalde? Pues tatiki de atún rojo, huevos rotos con trigueros, bacalao con estofado de callos y cochifrito. También parece que se dejó ayudar en lo referente a las guarniciones porque no vemos a Belloch muy ducho en las esferificaciones de calabaza que acompañaban sus platos, aunque para ver si da o recibe calabazas, a secas, habrá que esperar a su última gran cita política que será el debate del estado de la ciudad en apenas quince días.